Fue el fin de un periplo por Nueva York y por la capital de ese país, donde -junto al presidente de la comisión de Hacienda de la Cámara Baja, Eugenio Tuma (PPD), y los diputados Raúl Sunico (PS), Alberto Robles (PRSD), Julio Dittborn (UDI) y Roberto Delmastro (RN)- se reunió con bancos de inversión, autoridades públicas y privadas del país más rico del mundo con el objeto de recoger, de primera fuente, lo que los principales líderes en la toma de decisiones de EE.UU. están haciendo para enfrentar la crisis crediticia -conocida como "subprime"- y cómo está haciendo Chile las cosas para enfrentar la crisis.
El ministro Velasco fue enfático: "No hay ningún, y repito, ‘ningún’ indicio de una situación de inestabilidad financiera como la de EE.UU. que pudiese extenderse a Chile. Al revés. Hemos estado en más de una docena de reuniones y entrevistas y la conclusión es que América Latina, y Chile en particular, en este ciclo está muchísimo más protegida que en otros ciclos recesivos y de inestabilidad financiera de la economía".
Aun así, Velasco fue un poco más allá y no quiso pecar de autocomplacencia: "Si bien no hay dos lecturas acerca de la fortaleza macroeconómica de Chile -dijo-, sí está claro que tenemos tareas (en lo microeconómico) hacia adelante. Es el caso de temas de energía, y en particular destacó el de la educación, en donde tuvimos un diálogo con el representante de Singapur en el Consejo de las Américas, y recogimos su experiencia (en la reforma educacional) para aplicar en Chile lo que hizo en estas últimas dos décadas, que lo ha llevado como país a que en los últimos rankings aparezca con el mejor rendimiento en las pruebas estandarizadas".
Velasco destacó, además, que la crisis crediticia es el reflejo de que EE.UU. terminó cayendo en los mismos errores que los norteamericanos les criticaron a los latinoamericanos hace 20 años: "En esta vuelta no practicaron lo que predican. La regulación se tornó insuficientemente rigurosa, nuevos instrumentos que antes no existían no fueron evaluados como corresponde, las agencias de rating resultaron tener serios conflictos de interés y su resultado hoy lo vemos nítidamente. Eso se paga", remató.