Actualmente el tráfico de datos a través de la telefonía móvil es sólo de un dos por ciento, mientras que el 98 % restante es de voz; sin embargo, las previsiones apuntan a que en cinco años la transmisión de datos llegará a suponer el 60 por ciento del tráfico total inalámbrico en todo el mundo. Por esto es imprescindible establecer un estándar válido para todo el planeta, ya que actualmente cada continente tiene un estándar de telefonía diferente.
Según Luis Ezcurra de Alburquerque, director general de Motorola Telefonía Móvil en España, "en un plazo de cinco años, los operadores existentes ahora en nuestro país estarán dando más beneficios, porque habrán concluido su ciclo de amortización de las inversiones. Las redes ya estarán amortizadas y, por la dinámica de la propia competencia, los costes de interconexión muy posiblemente van a bajar. Vamos a un escenario en el que el coste potencial de la llamada para el consumidor puede caer en telefonía móvil, frente al coste de la llamada local en telefonía fija, que está subiendo. En el momento en que las dos curvas se crucen, un usuario al que le cueste lo mismo conectarse a Internet o recibir su correo electrónico vía fija o vía móvil, muy probablemente se inclinará al móvil porque será la forma más habitual de comunicación".