Tras permanecer estático durante varias horas frente a Cabo San Lucas, en Baja California Sur, el huracán Greg se convirtió en tormenta tropical, y aunque se mantiene el estado de alerta, los residentes comenzaron a regresar a sus hogares inundados por las lluvias.
Los estados más afectados fueron Michoacán, Colima y Jalisco, ya que ahí se registraron 4 muertos, la pérdida total de unas 250 casas, diez ríos desbordados, inundaciones en campos agrícolas y derrumbes en carreteras, lo que mantiene incomunicadas a miles de personas.
En los municipios de Autlán, Chihuatlán y Casimiro Castillo, del estado de Jalisco, al menos unas 8 mil personas están incomunicadas. En Chihuatlán se reportó la muerte de unas 500 cabezas de ganado, y la inundación del 90 por ciento de la superficie agrícola, así como 250 personas desalojadas de sus viviendas.
Las autoridades advirtieron que el peligro no ha pasado, y el Centro de Huracanes de Estados Unidos informó que lo peor podría estar aon en camino, ya que el centro de la tormenta no ha llegado aun a Cabo san Lucas. (Mx/QR/Nt/Dn/mc)
EL HURAC-N GREG MANTIENE TODAVÍA EN ALERTA A LA POBLACIÓN
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