Hace exactamente un año, – en abril de 1998 -, Donna Fasano y Deborah Perry visitaron el mismo día al mismo médico en una clínica de Manhattan. El objetivo, someterse a sendas fecundaciones in vitro.
Meses después, Donna fasano dió a luz a dos gemelos, y la sorpresa de todos fue impresionante cuando descubrieron que uno de los bebés era blanco y el otro negro.
Losa abogados de las familias han manifestado que un error médico es el responsable de tan extravagante acontecimiento, ya que el ginecólogo que atendió a las dos mujeres, implantó a la señora fasano no solo sus cuatro óvulos, sino también los del matrimonio Roggers.
Las pruebas del ADN demostraron que Donna fasano no es la madre biológica de uno de los niños, y ésta ha consentido entregar a los Roggers al segundo de los bebés, si las pruebas demuestran que ellos son los padres.(pulsar)
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