Tres de cada cuatro víctimas del sida son africanos. En ese continente viven 7 de cada diez adultos portadores del virus y ocho de cada 10 diez niños con el mismo problema. Algunos países africanos están condenados a desaparecer a mediano término si la epidemia continúa expandiéndose.
Esta es una de las principales conclusiones del Informe sobre el sida en el mundo que acaba de ser presentado en la sede ginebrina de las Naciones Unidas.
La enfermedad ha provocado este año tres millones de muertes, un récord que eleva a 21.8 millones la cifra de las víctimas por este mal en los últimos 20 años. Más de 36 millones de personas en todo el planeta viven con el virus, de los cuales casi la mitad son mujeres y un cinco por ciento son menores de 15 años.
En América Latina, 150 mil nuevos casos de sida han sido detectados este año. En el Caribe esa cifra oscila en los 60 mil. ONUSIDA, el organismo de Naciones Unidas encargado de darle seguimiento a esta epidemia, considera que 1.4 millones de personas tienen sida en Latinoam’rica.
En las naciones enriquecidas del Norte la cantidad de nuevos casos no ha cambiado significativamente comparado a las cifras del a_o anterior.
Analistas del problema insisten en la relaci¢n directa entre pobreza y muerte por el sida. Los precios aplicados por los grandes monopolios farmac’uticos a los medicamentos contra el sida, son excesivamente caros. Debido a esta situaci¢n muchos enfermos est n condenados a morir. (Mu/QR/Oi-Pno/Sa-Pb/ap)
Sergio Ferrari