Que alguien declare públicamente su homosexualidad ya no resulta llamativo en la sociedad europea. Pero otras son las consecuencias si quien lo hace es un alto mando militar.
El teniente coronel José María Sánchez Silva hizo pública su opción sexual en la revista «Zero», afirmando que lo hacía amparado por la Constitución y las normas que impiden cualquier forma de discriminación.
El militar, pertenece al Ejército español, tiene 49 años, una amplia carrera jurídica y docente en el seno del ejército, además de varias condecoraciones.
Los medios de comunicación le hicieron entrevistas y las tertulias habituales en las radios le tuvieron como tema principal. Quizás así se cumple uno de sus primeros objetivos: «plantar una semilla y provocar un debate». Su valiente actitud propone admitir como normal la presencia de homosexuales en las Fuerzas Armadas. De momento, un «silencio de piedra» según su propia expresión, le recibió cuando llegó a su despacho en el Cuartel General del Ej’rcito.
El teniente coronel, sonriente afirma: «Me he quitado un peso de encima y desde ahora me siento mas libre». S nchez Silva afirma que con su actitud lo onico que ha pretendido es que las leyes no sean s¢lo letra sino que se cumplan.
Su paso al frente ha provocado grietas en la hipocres¡a que habitualmente intenta enmascarar la realidad social europea, en ‘ste y en otros tantos aspectos. (Euro/QR/Mt-Ci/Dh/ap)
Carlos Iaquinandi Castro