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Si algún desprevenido lo abre, allí no encontrará foto alguna de Kournikova, el virus entrará a hacer de las suyas, tomara todas las direcciones de su libreta (del programa Microsoft Outlook) para reenviarlo.
El virus se propaga a mayor velocidad que otros ya conocidos indicaron los especialistas y se convierte en una verdadera amenaza dado que puede llegar a obstruir sistemas de correo electrónicos.
