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La protección de la naturaleza en Paraná pretende conseguir que el bosque absorba el carbono de la atmósfera. La Sociedad de Investigación en la Vida Salvaje y Educación Ambiental, una organización no gubernamental de Curitiva, será la propietaria administradora del área protegida.
Ciertamente, el proyecto es parte de la estrategia de la empresa para hacer un pago extraordinario para que se le permita emitir contaminantes. Esto según el análisis de Joao Paulo Capobianco, del Instituto Socioambiental.
Para el especialista, las grandes compañías están creando y donando estos fondos para obtener una especie de «crédito de contaminación» y ser beneficiada en el futuro. (Br/QR/Em-Nt/Ec/ap)
