En la ciudad de Bogotá este jueves, el Presidente, Andrés Pastrana, presentó formalmente la ôLey de Juegos de Suerte y Azarö.
La normativa -señaló Pastrana- pone al día la voluntad de los Constituyentes de 1991 que quisieron ôsometer la organización, administración, explotación y control de ese monopolio rentístico (…) en favor de los servicios de saludö.
Pastrana aseveró que la Ley le quitará al juego su ôaspecto oscuroö convirtiéndolo en una verdadera industria que generadora empleo con la consiguiente dinamización de la economía. Según consideró el Jefe de Estado, la ley no implica meramente una simple regulación de carácter económico sino que es en si misma una ôtabla de salvaciónö para el sector salud, cuanto una garantía social ôde la explotación monopolística estatalö. Más adelante agregó que tal monopolio ônutrirá con recursos frescos a las haciendas locales", después de cuatro frustrados procesos de aprobación en el Congresoö.
El principal objetivo de la normativa es evitar que, tal como viene ocurriendo, las loter¡as del pa¡s paguen poco en premios, tengan costos administrativos y operativos sumamente elevados y les reporten escasos ingresos fiscales a los municipios, departamentos y distritos. Tambi’n permitir combatir la evasi¢n que se registra en el juego de chance y otros juegos y garantizar que los recursos recuperados se destinen a las rentas departamentales y municipales.
Los ingresos por juegos se estiman en 3 billones de pesos (unos 1328 millones de d¢lares) de acuerdo con las estimaciones gubernamentales, las transferencias deber¡an duplicar las actuales. En el primer a_o el Gobierno colombiano piensa obtener medio bill¢n. A esto debe sumarse las transferencias -al sector de la salud- que se derivar n de la producci¢n del juego de loto, las mimas fueron calculadas en unos 2 billones de pesos (aproximadamente 885 millones de d¢lares) en los pr¢ximos 10 a_os.
Asever¢, Pastrana que todo ello hace pensar que existen «razones suficientes para estar optimistas respecto de los efectos positivos que debe traerle esta Ley a la salud de los colombianos m s pobres».