Los nuevos servicios se basan en un acceso directo (a través bucle local liberalizado) y en la innovadora tecnología SDSL (Symetric Digital Suscriberm Line).
El acceso directo ha sido posible gracias a la liberalización del bucle local, que permite a COLT acceder directamente a las conexiones que unen a cada usuario con su central telefónica, es decir, sin intervención del operador incumbente. Estos pares de cobre se unen directamente a los equipos y las redes de COLT. De esta forma, COLT se hace completamente responsabe de los servicios que presta, y puede garantizar tanto la fiabilidad como la calidad de los mismos. El cliente tiene un único interlocutor para todos sus servicios.
Por otra parte, el principal valor diferencial que aporta la tecnología SDSL es su simetría, es decir, que ofrece la misma velocidad tanto en la recepción como en el envío de información. Si se suma su escalabilidad y su flexibilidad, se configura como una tecnología muy adecuada para el entorno empresarial.
COLT ha invertido en este proyecto 13 millones de euros con el objetivo de ofrecer este nuevo modelo de servicios en las tres ciudades españolas en las que está presente, Madrid, Barcelona y Valencia. Estas inversiones han sido destinadas a la instalación de equipos en centrales de estas tres ciudades, al equipamiento con tecnología SDSL y a la conexión de estos equipos a las redes metropolitanas de fibra óptica de COLT.
Ginés Alarcón, Director General Adjunto de COLT en España, destaca que «COLT entra en el mercado bucle local e incorpora un nuevo modelo de servicios de banda ancha como complemento a su tradicional oferta de fibra óptica. El objetivo de extender a las perqueñas y medianas empresas una oferta de calidad y fiabilidad que hasta ahora ha quedado reservada a las grandes corporaciones. Esta oferta es la más adecuada para el entorno empresarial frente a otras tecnologías asimétricas».
Los clientes del nuevo modelo de servicios SDSL de COLT estarán además conectados directamente a la red de fibra óptica de COLT, que incluye, no sólo las redes metropolitanas de Madrid, Barcelona y Valencia, sino la presencia en otras 29 ciudades europeas a través de su red paneuropea.