La investigación, efectuada por Flavio Rodrigues y dirigida por los profesores de la Universidad de León Julián Zapico y Mª Luisa Alonso, tenía como objetivo caracterizar el comportamiento físico –reología- de los productos estudiados; determinar los valores de las propiedades físicas de esos alimentos: humedad, densidad y adherencia; establecer la cantidad de producto que permanece en el envase después de una utilización normal; y relacionar la cantidad de alimento que queda en el envase con las propiedades físicas y el comportamiento de los líquidos.
Las principales conclusiones extraídas señalan que el material de envase influye en el porcentaje de pérdidas. Así para todos los productos en su conjunto, el vidrio es en el que menos se pierde (el 1,09%), seguido del metal (1,27%), el plástico (1,45%) y el cartón (1,80%); la situación cambia ligeramente si se consideran sólo los derivados de tomate, en los que el plástico pierde ligeramente menos que el metal.
Además, estadísticamente se ha demostrado que los derivados de tomate por un lado y las mayonesas por otro, presentan un porcentaje de pérdidas que puede predecirse mediante tres variables: densidad, número de componentes y naturaleza del envase. Por otra parte, la salsa blanca (base láctea) es la que mayor porcentaje de pérdidas presenta de los 43 productos.