Proceso Inicial: Detectar las necesidades del mercado
En primer lugar, se detectó en el mercado una fuerte demanda de bebidas funcionales. Demanda que, además, está respaldada por cifras como que el 22% de los menores de dieciséis años no consume frutas ni verduras a diario, o que el 24% de los españoles no desayuna, según datos de la Junta de Andalucía. El Instituto Nacional de Estadística (INE), por su parte, señala que el consumo por persona de frutas y verduras se reduce cada año. En 2005 bajaron un 15% y un 17%, respectivamente.
Ensayos y pruebas
Una vez establecida la necesidad del mercado, se llevan a cabo diferentes ensayos de laboratorio y catas. En concreto, ‘Zumosol Activo’ se ha sometido a 95 ensayos y más de 200 catas internas para determinar la cantidad de huevo adecuada, seleccionar el zumo de naranja directo más apropiado, desarrollar las dos versiones del producto y definir los aromas.
Se precisan treinta y cinco pruebas más para que el producto llegue a los puntos de venta.
Quince se realizan en una planta piloto para definir la formulación y conseguir la combinación de sabor y textura que le reporte cualidades organolépticas adecuadas.
Otras diez pruebas industriales ponen a punto el proceso de fabricación y una nueva tecnología de envasado aséptico en plástico PET.
Por último, diez envejecimientos de muestras garantizan la buena evolución y calidad del producto.
Producto definitivo
‘Zumosol Activo’ es una bebida funcional a base zumo directo de naranja, zumo de uva y huevo líquido pasteurizado. Existe también la modalidad Activo Plus, a la que, sobre los anteriores ingredientes, se añade plátano. Adecuado para el desayuno o la merienda, está avalado por los test de producto elaborados por el Departamento de Marketing, que destacan que ha gustado, respectivamente, al 92% y al 84% de los consumidores. Finalmente, ambas marcas se presentan en envases individuales de 200 ml o de 750 ml, éste más apropiado para el consumo familiar.
P.R.Newswire