Según una nueva encuesta sobre pacientes, el 75% de los pacientes de cáncer nunca ha oído sobre la braquiterapia, una tecnología de vanguardia que lleva la dosis de radiación directamente a la zona del cáncer objetiva, evitando daños a los tejidos y órganos sanos y, minimizando los efectos secundarios. De los 25% que lo conocen, a sólo uno de cada cuatro se le ha ofrecido el tratamiento.
El profesor Peter Hoskin, oncólogo clínico consultor de Mount Vernon Hospital, Middlesex ha dicho que "La braquiterapia es poco conocida entre los pacientes con cáncer a pesar de la nueva tecnología, habiendo desarrollado la práctica para una opción de tratamiento mucho más efectiva. Con la braquiterapia, muchas personas no tienen que estar ingresadas cuando reciben la braquiterapia, o, si lo hacen, el tiempo es mucho menor que con otras opciones, como la cirugía".
En comparación con otras formas de radioterapia como el haz externo (EBRT), la braquiterapia puede ofrecer la dosis requerida de radiación en un tiempo de tratamiento más corto. En el tratamiento del cáncer de próstata, por ejemplo, los tiempos de tratamientos suelen ser de una semana o más con EBRT, pero sólo de uno o dos días con braquiterapia.
Además, el suministro preciso de radiación reduce el riesgo de daños innecesarios para los tejidos y órganos sanos circundantes, que ayuda a reducir los efectos secundarios. De nuevo, en cáncer de próstata el riesgo de efectos secundarios, como la incontinencia y disfunción eréctil, son mucho menores que con el resto de opciones de tratamiento.
La encuesta de pacientes de cáncer ICM* mostró que los hombres eran más propensos a que se les ofreciese el tratamiento. Cuatro de cada 10 hombres conocían la braquiterapia en comparación con menos de una de cada 10 mujeres. La concienciación entre las mujeres necesita aumentarse porque la braquiterapia puede ser tan efectiva para tratar indicaciones específicas de las mujeres como el cáncer de mama o ginecológico como para tratar el cáncer de próstata en hombres y con los mismos efectos secundarios minimizados.
La doctora Rachel Cooper, oncóloga clínica consultora de St James’ University Hospital, Londres, cree que esto se debe a la baja concienciación sobre lo que es la braquiterapia y qué tipos de cáncer ayuda a tratar. "La braquiterapia se utiliza a menudo para tratar el cáncer de próstata", ha comentado la doctora, "pero también es un tipo de radioterapia demostrado utilizado con éxito en un rango de otros cánceres como ginecológicos, de mama, de esófago, piel o rectal".
La encuesta ICM* confirmó que los pacientes acceden frecuentemente a Internet para obtener información sobre el tratamiento. "Cuanta más información haya disponible para los pacientes y sus familias, mejor", añadió el jugador Matt Dawson. "La información sobre opciones de tratamiento efectivas como la braquiterapia deberían ser fáciles de encontrar para cualquiera que se enfrente a un cáncer".
¿Qué es la braquiterapia?
La braquiterapia es una terapia de radiación de alta precisión, en la que la fuente de radiación utilizada para matar las células cancerígenas y destruir tumores se coloca en o cerca del tumor. La braquiterapia ofrece una opción de tratamiento precisa, altamente efectiva y bien tolerada adaptada a las necesidades de pacientes individuales. El enfoque de precisión de la braquiterapia permite a un medico concentrar una alta dosis de radiación en una zona pequeña, minimizando el daño a tejidos y órganos circundantes y sanos, en un período de tratamiento más corto.
Nota:Tanto la campaña "Because Life is for Living" como la web aboutbrachytherapy.com están patrocinados por Nucletron (la compañía que proporciona soluciones de radioterapia de última generación para el tratamiento del cáncer líder en braquiterapia. Web http://www.nucletron.com)
* La encuesta de pacientes de cáncer ICM se realizó en febrero de 2010, basándose en un grupo de 598 encuestas online completadas por los actuales o pasados pacientes de cáncer en el Reino Unido, EE.UU. y Países Bajos según el siguiente desglose: 250 encuestados en Reino Unido, 250 en EE.UU. y 98 en Países Bajos. Los encuestados fueron un 54% de hombres y un 46% de mujeres con edades entre 18 y 65.