La estrecha relación entre la EPOC y el tabaco
A pesar de los esfuerzos legislativos, el tabaquismo se sigue iniciando a edades precoces en España, entre los 12 y 13 años, de forma que el 80% de los casos se inicia en el consumo de tabaco antes de los 18 años. Según puntualiza el Dr. Juan Antonio Riesco, coordinador de Separ EPOC y Tabaco 2015-2016, el mayor porcentaje de fumadores se sigue dando en el estrato de edad entre 25-35 años, donde está el mayor porcentaje de fumadores con EPOC sin diagnosticar.
“Muchos fumadores presentan síntomas respiratorios crónicos y no consultan a su médico porque desconocen qué es la EPOC; de ahí que exista un infradiagnóstico de un millón y medio de casos; ya que los estudios epidemiológicos indican que en España hay 2 millones de pacientes de EPOC, pero se diagnostican poco más de medio millón de personas. El resto, continúan sin ser detectados y sin recibir tratamiento, por lo que su pronóstico es peor“, explica el experto.
Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), correspondientes a 2014, las respiratorias son las únicas patologías cuya mortalidad se ha incrementado respecto al año anterior, en un 3%.
En este escenario, el Dr. Riesco enfatiza que todos los fumadores con síntomas respiratorios y una edad superior a 35 años deben consultar con su médico para descartar la existencia de EPOC, que se desarrolla en uno de cada cuatro fumadores. “El tabaquismo puede ser un vehículo que conduzca al diagnóstico de la EPOC, ya que tenemos datos que indican que un 18% de los pacientes que acuden a las consultas para dejar de fumar son nuevos casos de EPOC”.
A pesar de saber que la causa principal de la EPOC es el tabaco, hasta un 35-50% de los casos diagnosticados continúan fumando.
“Esta prevalencia es muy elevada y se correlaciona con peor pronóstico de supervivencia, ya que los productos del humo del tabaco generan procesos inflamatorios en los pulmones, alteraciones y pérdidas de elasticidad pulmonar, que desemboca en tos, expectoración y disnea que conduce a pérdida de calidad de vida y exacerbaciones“, señala el Dr. Riesco.
¿Se desarrollaría la EPOC sin tabaco? Para el Dr. Riesco la respuesta es clara: “es difícil encontrar pacientes con EPOC que no hayan estado expuestos al humo de tabaco, ya sea como fumadores activos o pasivos. La relación etiológica de EPOC y tabaco es incontestable“.
Aunque ha sido una enfermedad más frecuente en hombres, la EPOC en mujeres españolas va en aumento debido al incremento de fumadoras, y en Estados Unidos ya se dan cifras sorprendentes, como que la EPOC ha desbancado a patologías como el cáncer de mama.
¿Qué ocurre en asma y en fibrosis pulmonar idiopática?
Aunque en la actualidad hay pocos estudios que valoren la prevalencia de fumadores asmáticos, el Dr. Riesco comenta que hasta un 38% de los pacientes con asma con hábito tabáquico niega que fuma. Sin embargo, este hábito queda patente en que obtienen peor respuesta al tratamiento, y por tanto una peor calidad de vida y pronóstico. El asma afecta al 5% de la población en edad adulta en España y, a nivel mundial, las estimaciones del número de personas que padecen asma varían de 235 a 300 millones.
Y en fibrosis pulmonar idiopática (FPI), los últimos datos que se conocen de esta enfermedad minoritaria y potencialmente letal es que un 40-80% de los pacientes son fumadores, siendo el tabaco uno de los factores más importantes para el desarrollo de esta patología. En nuestro país, la FPI afecta a entre 7.500 y 10.000 pacientes, cuya progresión es variable e impredecible y con el tiempo, la función pulmonar se deteriora gradual e irreversiblemente.
Fuente: Boehringer Ingelheim España