La Guardia Civil ha detenido en Barcelona a tres personas presuntamente implicadas en una red vinculada a la estructura logística de Hezbolá encargada de la adquisición de componentes fundamentales para la fabricación de drones capaces de transportar cargas explosivas a largas distancias. Esta intervención forma parte de la segunda fase de una operación iniciada en julio del pasado año bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción nº 1 y la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
Los registros practicados por los agentes han afectado a inmuebles que funcionaban tanto como domicilios particulares de los investigados como sedes sociales de empresas españolas. Dichas entidades, según ha acreditado la investigación, estaban directamente implicadas en la adquisición y exportación de material sensible, eludiendo los controles aduaneros y los mecanismos de fiscalización establecidos para prevenir este tipo de tráfico.
El análisis de la información recopilada durante la primera fase del operativo ha permitido no solo identificar a nuevos integrantes de la trama, hasta ahora desconocidos, sino también consolidar el modus operandi empleado por la organización. La operativa incluía la falsificación de facturas y la fragmentación de las compras, con el objetivo de evitar su detección mediante los sistemas de control ordinarios. La ocultación del verdadero destino de los envíos —principalmente dirigidos al Líbano— constituía una práctica sistemática.
Uno de los elementos más relevantes del caso ha sido el acceso ilícito a datos de identidad de personas de distintos países. Estos datos se obtenían mediante la actividad empresarial en el ámbito de la compraventa de entradas para partidos de fútbol, lo que facilitaba suplantaciones y transacciones encubiertas. La red utilizaba esta información para construir una fachada comercial que enmascaraba la adquisición del material tecnológico destinado a Hezbolá.
Las pruebas técnicas han determinado que los materiales obtenidos eran plenamente compatibles con los utilizados por la organización para la fabricación de drones de tipo militar. Estos dispositivos tienen la capacidad de transportar cargas explosivas de varios kilogramos y realizar vuelos de largo alcance con perfiles variables, lo que complica significativamente su detección y neutralización incluso para sistemas de defensa avanzados como el Iron Dome israelí.
Desde el 7 de octubre de 2023, Hezbolá ha lanzado varios centenares de drones contra territorio israelí, provocando tanto víctimas mortales como daños materiales. La conexión entre estos ataques y la logística investigada en España ha sido uno de los focos clave del trabajo llevado a cabo por la Guardia Civil.
Dada la dimensión internacional de la estructura investigada, la operación ha requerido una estrecha colaboración judicial y policial con autoridades de otros países. La coordinación se ha articulado a través de EUROJUST, y ha contado con la participación de organismos como la Dirección General de Seguridad Interior francesa (DGSI), la Oficina Federal de Investigación Criminal alemana (BKA) y el Counter Terrorism Command de la Policía Metropolitana de Reino Unido.
Tras ser puestos a disposición judicial, uno de los detenidos ha ingresado en prisión, mientras que los otros dos han quedado en libertad provisional con medidas cautelares.
Artículo redactado con asistencia de IA (Ref. APA: OpenAI. (2025). ChatGPT (versión 0406.2025). OpenAI)