Levín es un muchacho norteamericano que se educó en Israel, estudió en el Tejnión de Haifa y trabajó en IBM en esa ciudad. Continuó sus estudios en la MIT y allí, con su profesor, ideó un sistema para evitar los embotellamientos que se producen en la red Internet y acelerar la recepción de archivos, sobre todo gráficos, en forma significativa: diez veces más rápido que con los sistemas comunes.
Con todo respeto, ahora haría falta que el invento funcione, que la empresa de ganancias, que sume clientes y demuestre que el potencial teórico se lleva a la práctica. Nada de eso sucedió.
La empresa ACK-a-my nació en agosto de 1998. En los nueve primeros meses de 1999 tuvo ingresos por valor de 1.300.000 dólares y sus pérdidas llegaron a los 26.000.000 de esa misma moneda. Entre sus clientes se encuentran CNN y Yahoo! Pero no mucho más por el momento. ¿Qué adquieren los desesperados accionistas, que obligaron antes de la emisión a elevar el precio de las acciones y a emitir más cantidad? ¨C¢mo se explica que ese proyecto de empresa valga 13.200.000.000 de d¢lares, si se multiplica el precio de las acciones por su cantidad?.
Se explica entendiendo que los inversores adquieren una empresa virtual, un sue_o a realizarse. Son part¡cipes de un mundo que cree que dentro de muy poco todo cambiar y el futuro pertenece a la alta tecnolog¡a de internet. Lo que ahora da p’rdidas, ma_ana ser una mina de oro. La acci¢n que salt¢ de 26 d¢lares a 145 en un solo d¡a, pasar a costar cien veces tanto dentro de pocos a_os. No se recuerda una’ poca en la cual tanta gente est’ dispuesta a colocar su dinero en una especulaci¢n futura, casi sin mirar los balances del presente.
La otracara de la moneda est en la bosqueda y el supuesto hallazgo de gas y petr¢leo en Israel. Hace ya m s de 40 a_os que no se encuentran en Israel yacimientos explotables comercialmente. Incluso los que se encontraron entonces, en Jeletz, no fueron gran cosa. Desde entonces se busca afanosamente y se han invertido en ello hasta ahora 100 millones de d¢lares.
De tanto en tanto se encuentran se_ales de petr¢leo o de gas, los medios de comunicaci¢n muestran el l¡quido en crudo, o el gas ardiendo como una antorcha, y las acciones en la bolsa de Tel Aviv suben aceleradamente a la espera de los resultados finales de los an lisis: si es bueno, si es abundante, si es explotable comercialmente. Hasta ahora, nadie cruz¢ esa barrera.
Es importante saber que hay quienes ganan cada vez que se anuncia el hallazgo de gas o petr¢leo. No son s¢lo los especuladores, que saben comprar y vender a tiempo sus acciones, sino tambi’n los que viven nada mal de esas bosquedas. A todos ellos les conviene que de tanto en tanto se encienda alguna llama a lo alto de una torre, y que alguien autorizado diga «off the record» que «esta vez, aparentemente, las cantidades son comerciales».
Aqu¡, como en el caso anterior, se demuestra que de sue_os tambi’n se vive.
Extracto
Por Mosh’ Aheri para Aurora