Los países de América Latina habían apostado fuerte por hacer realidad lo establecido en el protocolo de Kyoto. Este acuerdo contiene un marco para afrontar y prevenir las consecuencias del cambio climático y estuvo nuevamente en debate hace poco en Holanda.
Sin embargo, esta cita finalizó sin un acuerdo para reducir las emisiones de gases de invernadero, responsables del recalentamiento del planeta y del cambio climático global. América Latina en su conjunto se ha declarado decidida impulsora del Protocolo de Kyoto y México se destacó al ser el único país de la región que ratificó este acuerdo antes de la reunión de Holanda.
En los países latinoamericanos existen diferentes enfoques, pero se mantiene un consenso en torno a la necesidad de apoyo para los países del sur.
Los ministros de medio ambiente de América Latina y el Caribe recalcaron la urgencia de que el Protocolo de Kyoto entre pronto en vigencia. Sólo así tendría frutos una conferencia mundial convocada para el a_o 2002, que evaluar los compromisos de la Cumbre de la Tierra realizada en R¡o de Janeiro en 1992.