Los profesores sabemos que la verdadera artífice de la formación integral es la familia. «De tal palo tal astilla», si los padres son equilibrados y sensatos los hijos serán igual, si padres violentos hijos violentos; casi con seguridad esto se da, ojalá siempre los hijos sean buena gente. Si la familia de los alumnos falla ya están los problemas anunciados sobre el alumno y alumna. A las aulas de los centros educativos nos llegan niños problemáticos, tanto que a veces llegan hasta la violencia y el insulto con los compañeros y profesores o material del centro. Es difícil dar con un profesor que no sufra las consecuencias de estos alumnos víctimas de las separaciones y divorcios o viudez de sus progenitores.
Para mejorar las condiciones de los alumnos, de sus familias no vendría mal que los ayuntamientos, comunidades autónomas, diputaciones y gobierno central pusiesen en marcha ayudas a los padres y madres en temas concretos de su economía, que los sacase de apuros y resultase menos caro educar a sus hijos. A muchos padres y madres apenas les llegan los dineros a fin de mes.
Y cuando los hijos solicitan libros y material escolar, dineros para fotocopias, para el bocadillo de las ma_anas, autobos, vestirlos, etc, han de hacer un gran esfuerzo, que la vida est car¡sima.
Tampoco vendr¡a mal que las organizaciones que tantos millones sacan de la planificaci¢n familiar, con sus ventas de anticonceptivos o preservativos o abortos, diesen ayudas a estas familias en apuros, para que atiendan las necesidades de los hijos que ya tienen, que eso ser novedoso para las mismas.
Viene a cuento esto de «familia unida jam s ser vencida», pero +y si est desunida?
Marcos Guti’rrez Sanju n
