Los vestidos emprenden auténticos juegos acariciadores sobre la silueta de la mujer V&L, sin fijarse en exceso sobre ella, consiguiendo un efecto racial, sin perder la frescura, elegancia y, sobre todo, la feminidad, que es nuestra guía constante.
Escotes asimétricos, aberturas, rematados con festones fruncidos; adornos en picados en hilo de torzal, aplicaciones en pedrería matizada, nos hacen visualizar el riguroso mimo dedicado a cada prenda, acercándola a la alta costura, donde formas inacabadas le proporcionan un aire de frescura y vanguardia.
El juego de texturas da la verdadera tridimensionalidad a la colección, disponiéndose en atractivos juegos de combinaciones a través de sedas, tafetas, punto de crèpe, algodón satinado, georgette, lino, donde el color beige es el verdadero protagonista, reactivado por toques metalizados que le dan luz y sofisticación. Los estampados son los encargados de dar la fuerza del color en forma de grandes manchas, como si de un gran lienzo se tratara (verdes, rojos, amarillo, azules…).
El hombre Victorio & Lucchino es el que cada vez tiene más claro cuál es su esencia. La elegancia, la masculinidad y una tendencia a lo casual, con prendas cada vez más sport, donde la comodidad prima.
Una elegante sastrería se ha establecido ya como una clásico dentro de nuestras colecciones, donde el impecable patronaje se alía con tejidos de lana de máxima calidad, dando lugar a una silueta impecable.
Algunos toques de fantasía con tejidos corbateros.
El sport busca en tejidos, como la lonetas, el algodón y el punto, sus materias de construcción, con toques técnicos que le dan modernidad.
El colorido se manifiesta en una paleta de tonos neutros, beige, azul, negro, blanco, con toques de color, sobre todo en la camisería (amarillo, coral, azul…), que producen efectos ópticos.
Victorio & Lucchino PRIMAVERA-VERANO 2009