La Organización Mundial de la Salud (OMS) alerta de que hay lagunas en la vigilancia de la nación y podrían estar produciéndose contagios aún no reportados. Es la misma organización (OMS) la que alerta del elevado riesgo de contagio internacional debido a este descontrol sobre la enfermedad y las personas infectadas.
Las autoridades nacionales han emprendido varias campañas de vacunación y se reforzarán con otras nuevas en septiembre y octubre.
La enfermedad de la polio:
En los países en desarrollo, el virus de la poliomielitis se propaga normalmente a través de alimentos o agua contaminada con heces infectadas. En los países con niveles más altos de saneamiento, la enfermedad se transmite generalmente a través de microgotas de la persona infectada expelidas al ambiente por su tos o estornudos.
Los síntomas iniciales incluyen fiebre, dolor de cabeza, náuseas y vómitos. El virus afecta principalmente a niños menores de cinco años y dañará sistema nervioso central de aproximadamente uno de cada 100 pacientes, causandole algún tipo de parálisis.
Recomendaciones al viajero:
Cualquier persona que tenga previsto viajar a RD del Congo DEBE estar TOTALMENTE INMUNIZADA contra la polio. En general esta recomendación funciona para cualquier viajero y destino. La precaución elgiendo tanto comida como bebida ‘seguras’ es una constante al moverse por el mundo.
Inmunidad vía vacunación:
La primera vacuna contra la polio suele recibirse a edad temprana, siendo niños, tanto vía oral como inyectada (en EEUU sólo se usa la inyección)
Para quienes hayan recibido la primera vacunación, se recomienda que se vacunen de nuevo. De esta forma quedarán inmunizados de por vida. Si no se han vacunado de niños o no se sabe a ciencia cierta si nos hemos vacunado en alguna ocasión también deben vacunarse antes de partir a la zona de riesgo para protegerse durante su estancia.
La recomendación es que las dos primeras vacunas se espacien entre sí de 4 a 8 semanas y que la tercera dosis se administre de 6 a 12 meses después de la segunda vacunación.
Cómo elegir fuentes de alimentación/bebida seguras:
• Consuma exclusivamente agua embotellada o refrescos enlatados y evite SIEMPRE el consumo de agua del grifo. Puede purificar agua para su consumo hivéndola o tratándola previamente con cloro o yodo. No beba directamente de botellas/latas que hayan sido enfriadas en cubos con hielo/agua ya que el exterior se puede encontrar contaminado (este fallo es habitual en viajeros inexpertos)
• Evidentemente no consuma bebidas con hielo, ya que podría haber sido elaborado con agua contaminada.
• Consuma alimentos preparados (cocinados) y servidos en caliente
• No consuma alimentos en puestos ambulantes. Tampoco coma alimentos crudos como ensaladas o fruta (ojo al lavarla)
• Asegúrese de que los productos lácteos han sido pasteurizados
• Lávese las manos frecuentemente
Fuente: International SOS