La Policía Nacional, en colaboración con las fuerzas policiales de Suecia y Dinamarca, y bajo la coordinación de EUROPOL y EUROJUST, ha desmantelado una organización criminal que operaba desde Alicante y se dedicaba al reclutamiento de menores para cometer asesinatos y atentados con artefactos explosivos.
En la operación, se detuvo a tres personas de nacionalidad sueca –un matrimonio y su hijo menor de edad– responsables de reclutar jóvenes a través de canales de Telegram y de organizar las actividades delictivas desde un centro de operaciones en San Juan (Alicante).
Inicio de la investigación: un asesinato frustrado en Málaga
La investigación comenzó en mayo, cuando un menor de edad de nacionalidad sueca fue detenido en Benalmádena (Málaga) tras viajar a España para asesinar al miembro de un grupo motero rival. Este joven, captado mediante redes sociales, había sido objeto de un proceso de adoctrinamiento y enviado con un plan detallado que incluía:
- El envío de un fusil de asalto para cometer el crimen.
- Un plan de huida mediante un patinete eléctrico.
La intervención policial evitó el asesinato y llevó al descubrimiento de una red que operaba más allá de España.
Detenciones en Dinamarca
De forma paralela, las autoridades detuvieron en Dinamarca a otros dos menores de edad suecos, también vinculados a la organización, que habían sido enviados para cometer otro asesinato. En este caso, se les confiscaron dos armas de fuego, reforzando la hipótesis de que el grupo criminal operaba a nivel transnacional.
La red criminal en Alicante
La segunda fase de la operación se centró en identificar y detener a los líderes de la organización que reclutaban a los jóvenes, organizaban los asesinatos, gestionaban el tráfico de armas y drogas, y blanqueaban dinero. La investigación reveló que:
- Un matrimonio sueco y su hijo menor gestionaban las actividades desde un domicilio en San Juan (Alicante).
- La vivienda funcionaba como centro de operaciones, donde se administraban cuentas de redes sociales utilizadas para captar a los menores y enviar las órdenes de ejecución de los crímenes.
Durante la operación, los agentes detuvieron a los tres miembros de la familia y descubrieron pruebas clave que vinculaban el domicilio con los atentados y asesinatos planificados.
Un modelo criminal sofisticado y transnacional
La red criminal mantenía vínculos estrechos entre Suecia y los países del Este de Europa, operando como una organización especializada en actividades de alto riesgo. Utilizaban herramientas digitales para reclutar a los menores, adoctrinarlos y coordinar las operaciones criminales.
Según las autoridades, esta estructura criminal estaba involucrada también en el tráfico de armas y drogas, financiando sus actividades ilícitas mediante operaciones de blanqueo de capitales.
Un operativo financiado por la Unión Europea
La operación fue cofinanciada por los Fondos de Seguridad Interna (ISF) de la Unión Europea, como parte de los esfuerzos para combatir las amenazas criminales más significativas en el territorio comunitario. Esta iniciativa busca desmantelar redes delictivas, combatir el terrorismo y proteger a los ciudadanos europeos mediante una colaboración estrecha entre los Estados miembros y las agencias europeas.
La investigación conjunta ha permitido:
- La detención de tres personas en Alicante, consideradas los líderes de la organización.
- La frustración de dos asesinatos en España y Dinamarca.
- El desmantelamiento de una red transnacional que explotaba menores para cometer delitos graves.
La colaboración entre la Policía Nacional, las fuerzas policiales de Suecia y Dinamarca, y los organismos europeos demuestra la efectividad de la cooperación internacional en la lucha contra el crimen organizado.
Artículo redactado con asistencia de IA (Ref. APA: OpenAI. (2024). ChatGPT (versión 4.0). OpenAI).
Fuente: Policía Nacional