La discusión sobre la erradicación de cultivos ilícitos en Colombia volvió a tomar fuerza. El gobierno estadounidense realizó dos enmiendas al paquete de ayuda conocida como Plan Colombia. Primero, argumentó que el hongo Fusarium Oxysporum es un arma tóxica y que su utilización violaría el convenio de armas tóxicas. Además, se replantearon las metas de erradicación.
Las organizaciones que protestan por la utilización del Fusarium dijeron que este es un reconocimiento a que la erradicación por medios biológicos tiene implicaciones ambientales. Estados Unidos dejó en manos de Colombia la decisión de utilizarlo, acudiendo de nuevo a la figura del «waiver» o excepción.
En ese sentido, las organizaciones sociales pidieron a Juan Mayr, Ministro de Medio Ambiente de Colombia, que cese en su intento de crear un microherbicida colombiano. Por otra parte, analistas concluyen que todavía hay tiempo para redireccionar la ayuda militar de Estados Unidos hacia el desarrollo alternativo.
El argumento es que todav¡a pasar un a_o antes que comiencen a llegar los helic¢pteros anti-narc¢ticos, y que en la medida en que las FARC participen en la erradicaci¢n manual de cultivos il¡citos, se puede conseguir el apoyo de Europa. Sin embargo, las FARC anunciaron la semana pasada que desistir n de su propuesta de sustituci¢n de cultivos porque no recibieron respuesta del gobierno.
Segon un informe de la Defensor¡a del Pueblo, una hect rea de caf’ deja ganancias por 3 mil d¢lares en 2 a_os. Si en la misma hect rea se siembra amapola, en los mismos dos a_os genera ganancias por 54 mil d¢lares. Sin embargo, segon el programa del gobierno ,»Plante», «por cada mil pesos que paga el comprador de coca en el exterior, el campesino colombiano apenas recibe 6 pesos». (Co/QR/Au-Po/Dg-Dh-Pl/pt).