La militarizacion de areas naturales protegidas y de otras zonas de alta fragilidad ecologica no servira como un manto protector. Asi lo asegura la organizacion mundial ecologista Greenpeace.
A decir del director de esa organizacion en Mexico, Alejandro Calvillo, la mayoria de esas regiones son ocupadas por comunidades indigenas, las mas marginadas y olvidadas por una politica gubernamental que les impide tener alternativas productivas.
«Si ellos estan en esas zonas montaniosas, en las de mayor
diversidad, es porque fueron expulsados de las tierras fertiles por todo tipo de intereses. Los hacedores de la politica no conocen su realidad ni entienden las alternativas exitosas de productos organicos que se han hecho en algunas regiones. Toca al gobierno apoyarlos con la certificacion y apertura de mercados para esos productos».
Alejandro Calvillo advirtio que hay que combatir los intereses de las grandes industrias procesadoras de alimentos, no por la competencia de las comunidades indigenas sino «por la conciencia que empezarian a generar
sobre la calidad de los alimentos que producen las grandes corporaciones».(Mx/QR/Oi/Ec-Dh/mc)