Un grupo de indígenas zapotecas llegó este domingo a la capital mexicana para buscar apoyo y justicia a favor de sus presos políticos. Los dirigentes indígenas están internados en cárceles de los estados de México y Oaxaca.
Cinco hombres, cuatro mujeres y dos niños iniciaron una serie de jornadas para llamar la atención de la sociedad y del gobierno. Estas acciones fueron apoyadas por algunas organizaciones de derechos humanos.
Los dirigentes zapotecos fueron detenidos cuando se opusieron a que sus autoridades sean cambiadas arbitrariamente por el gobernador de Oaxaca. En la detención de los más de 200 zapotecos, participaron policías y militares.
Las autoridades municipales zapotecas detenidas fueron electas en base a los usos y costumbres de los indígenas. El gobierno los acusó de ser parte del Ejército Popular Revolucionario. (Mx/QR/Po-Au/Et/mc)
LOS ABUSOS CONTRA LOS INDÍGENAS NO CESAN EN M+JICO
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