172
Además, Magnus Bj÷rklund posee ahora un tipo de voz compungida que casa perfectamente con este emopop, canciones melódicamente imprecisas pero detalladas, preciosistas. Puede que los fans más ortodoxos del hardcore repudien este giro, suele ocurrir, pero ante la magnitud dramática de «Man or mouse» o «Great american lies» es difícil no caer rendido. Densidad de sentimientos para un lavado de cara valiente.