Finalmente el tan ansiado anunció llegó la tarde del lunes. Desde la Residencia de Olivos, el Presidente Fernando de la Rúa y el Ministro de Economía José Luis Machinea, informaron que el apoyo financiero internacional ascendía a un monto total 39.700 millones de dólares. De la Rúa puso de relieve que la concreción de la ayuda financiera representaba un ôrespaldo explícito a la política de responsabilidad fiscal y crecimiento económicoö.
Por su parte, el titular de Economía en su exposición ante la prensa, precisó que si bien la ayuda es de naturaleza contingente, también ofrece al país ôdisponibilidad inmediataö. La operación, señaló Machinea, ôse extiende hasta el 2003, y del monto total, 26,2 mil millones estarán disponibles antes de diciembre de 2001ö.
Seguidamente detalló: ôel financiamiento obtenido se integra de la siguiente manera: 13,7 mil millones de dólares aportados por el Fondo Monetario Internacional, 2,5 mil millones por el Banco Interamericano de Desarrollo, otros 2,5 mil millones por el Banco Mundial, 1,0 mil millones por el Gobierno de Espa_a, 10,0 mil millones por los bancos creadores de mercado de T¡tulos Poblicos, 3,0 mil millones por inversores institucionales de nuestro pa¡s, y 7,0 mil millones resultantes de diversas operaciones de Canje de Bonos y reinversi¢n de cupones».
Machinea remarc¢, «la contundencia del resguardo financiero que hemos obtenido elimina cualquier incertidumbre que pudiera existir sobre la continuidad del rumbo trazado». Al tiempo asever¢ que el mismo, «asegura y refuerza la efectividad del proceso de ordenamiento fiscal y de reformas y pol¡ticas procompetitivas que hemos puesto en marcha desde el mismo comienzo de nuestro gobierno, y crea el espacio necesario para profundizar y acelerar ese rumbo».
En otro tramo puso de relieve cuatro aspectos de la asistencia recibida. En tal sentido, precis¢, «el primero es que la misma no tiene ninguna otra condicionalidad m s que el apoyo irrestricto al programa econ¢mico argentino enunciado por el Presidente De La Roa el 10 de noviembre pasado. El segundo es el car cter preventivo de esta operaci¢n, que la convierte en onica en su tipo y borra cualquier eventualidad de una crisis del horizonte argentino. El tercero es que no implica un aumento de la deuda poblica argentina, dado que la parte del blindaje que efectivamente se utilice servir para cancelar deuda preexistente. Quiero decirlo enf ticamente: en ningon escenario hay aqu¡, como consecuencia de este apoyo internacional, un aumento de la deuda poblica argentina». Finalmente el cuatro aspecto, indic¢ el funcionario, «es que esta asistencia financiera es sustancialmente m s barata en t’rminos de tasa de inter’s, que lo que hemos venido pagando hasta ahora en los mercados». Explic¢, que la parte de los nuevos cr’ditos que efectivamente utilice el gobierno, «implicar el reemplazo de una deuda cara por una nueva deuda m s barata», asimismo, significa, «que al cobrar plena conciencia los mercados financieros de esta nueva situaci¢n, las tasas de inter’s caer n gradualmente y la carga de intereses que pesa hoy sobre todos los argentinos disminuir en el futuro. Por supuesto, no pagaremos ningon inter’s sobre la parte de estos cr’ditos no utilizada».
Machinea dej¢ en claro que el blindaje no representa una soluci¢n m gica. Al respecto se_al¢ «no esperamos que, por s¡ solo, el blindaje produzca ningon milagro. Pero estamos convencidos que varios factores que ven¡an frenando nuestra econom¡a comienzan a desvanecerse».
Entre esos factores destac¢ que por un lado la «etapa de reordenamiento de las finanzas poblicas est completada», y por el otro se visualizan avances significativos tendientes a mejorar la competitividad de la econom¡a. En esa direcci¢n indic¢ que se pusieron en pr ctica «pol¡ticas de est¡mulo a la producci¢n. Adem s, el escenario internacional comienza a evolucionar de un modo m s favorable a nuestro pa¡s (previsible descenso de las tasas de inter’s internacionales, apreciaci¢n esperada del euro respecto al d¢lar, y mejora de nuestros t’rminos de intercambio)».
En otro tramo de su comparecencia ante la prensa, Machinea, enfatiz¢, «el pa¡s est iniciando una nueva etapa». La cual, destac¢, «se inicia despu’s de un primer a_o de gobierno sin duda dif¡cil, en el cual hubo que batallar duramente para recuperar el control de las cuentas poblicas, pero que, por esa circunstancia y por un contexto internacional desfavorable, fue un a_o de m s incertidumbre y sorpresas de lo que hubi’ramos deseado».
Superadas tales dificultades, asever¢ el funcionario, «tenemos por delante el tiempo de profundizar nuestra pol¡tica, convencidos de que tenemos por delante una etapa de crecimiento sostenido». Crecimiento sostenido dado que las «condiciones de una econom¡a fiscalmente solvente, monetaria y financieramente robusta, y crecientemente competitiva, se le suma un blindaje en el cual venimos trabajando en silencio pero con perseverancia desde hace varios meses», afirm¢ Machinea.
Por otra parte en relaci¢n a las condiciones de liquides del pa¡s, se_al¢ que el blindaje despejaba las dudas al respecto y que ello redunda e dos importantes beneficios.
«En primer lugar, nos permite garantizar que a partir de ahora no habr subas de impuestos ni cambios en las reglas de juego que puedan afectar la confianza de los consumidores ni de quienes deben tomar decisiones de inversi¢n. En segundo lugar, le dar su m xima efectividad a las medidas que ya hemos tomado a favor de la producci¢n y el crecimiento durante el a_o 2000, en que iniciamos el proceso de eliminaci¢n de todos los impuestos distorsivos por un monto que, hasta ahora, representa 2 mil quinientos millones de pesos durante los a_os 2001 y 2002 y, como consecuencia, una mejora en la rentabilidad esperada de las nuevas inversiones», explic¢ el Ministro.
En los tramos finales, recalc¢, «que nadie lo dude. Argentina no est condenada al estancamiento, como no lo estuvieron otros pa¡ses que enfrentaron situaciones semejantes y las superaron exitosamente». (…) Se_oras, se_ores: tengamos confianza en nuestro potencial y nuestras fuerzas. El futuro aparece promisorio. Estas nuevas circunstancias financieras en las que se inscribe desde hoy la vida econ¢mica del pa¡s permitir n que los empresarios, los inversores, los consumidores, en fin, toda la ciudadan¡a, afronten los importantes desaf¡os que tenemos por delante en el clima de tranquilidad y certidumbre indispensables para concretar un proceso de crecimiento sostenido con equidad social. Renovemos la esperanza en esta nueva etapa que hoy iniciamos. Tenemos con qu’ hacerlo».
Alberto Bastia
Jefe Corresponsal¡as Informativos.Net en Am’rica Latina