Bell, recalcó que no debe -bajo ningún punto de vista- confundirse el ôrenacer democráticoö con el supuesto ôrecrudecimiento de la corrupciónö. Seguidamente, precisó que en varios países el retorno a regímenes democráticos abrió el debate sobre temáticas vinculadas a la corrupción, empero aclaró que ello no significaba que la democracia hubiera traído consigo tal flagelo.
ôLo que está indicando es que la democracia ha llegado abriendo espacios para que se puedan discutir públicamente temas antes vedados por la tiraníaö, aseveró Bell. Al tiempo, aseveró que tan sólo en regímenes democráticos es posible discutir la corrupción. El Vicepresidente indicó que para ello es menester una ôoposición activa que ejerza efectiva, responsable y dignamente sus tareas fiscalizadorasö, y un «marco mínimo de garantías y mecanismos institucionales para que la oposición pueda hacer oír su vozö.
Posteriormente, Bell detalló que para combatir la corrupción varios son los elementos que se requieren, entre ellos, la trasparencia en la representaci¢n pol¡tica, la funci¢n fiscalizadora de los medios de comunicaci¢n social y la activa participaci¢n de la ciudadan¡a.
La defensa de la democracia como sistema pol¡tico -sostuvo Bell- requiere de la denuncia, investigaci¢n y sanci¢n de los actos de corrupci¢n.
M¢nica Escayola
Corresponsal Informativos.Net en Am’rica Latina