El juez Baltasar Garzón anunció desde Barcelona su plena confianza en la justicia chilena en relación al caso Pinochet. Refiriéndose al juez Juan Guzmán Tapia, destacó «el gran valor que tiene, dentro de lo que a los jueces les corresponde, que es cumplir con el deber».
Garzón no ha expresado su opinión sobre el desarrollo del caso Pinochet. Sin embargo, afirmó que la resolución de Guzmán Tapia y posteriormente de la Corte de Apelaciones corresponden al desarrollo normal de la causa.
Igualmente consideró que para garantizar el buen resultado del proceso es necesario que la justicia chilena separe su labor de los otros poderes estatales. Y afirmó que «El principio de división de poderes sostiene el estado de derecho en todas las democracias modernas».
Mientras tanto, Pinochet aguarda la decisión sobre el centro médico en el que debe realizarse los exámenes para determinar su estado mental y poder continuar con el proceso. (Cl/YH/Au/Pl/jpb-ap)
