La décimo segunda ronda de conversaciones migratorias entre Estados Unidos y Cuba concluyó «sin penas ni glorias». De todas maneras, ambas partes coincidieron en reconocer la utilidad y seriedad de ese tipo de encuentros.
En la reunión celebrada en La Habana, la Ley de Ajuste Cubano, de 1966, volvió a ser la nota discordante en el diálogo. Estos encuentros se celebran desde hace 5 años con una frecuencia bianual.
Mientras Cuba reiteraba su decisión de luchar contra dicha legislación, la representación estadounidense reafirmaba que continuaría aplicándola. Cuba considera esa ley como un estímulo desde Estados Unidos a la emigración ilegal.
El Jefe de la representación cubana en la cita, Ricardo Alarcón, dijo que la Ley de Ajuste Cubano conspira contra el cumplimiento de los acuerdos migratorios suscritos por Washington y La Habana en 1994 y 1995. El también Presidente del Parlamento de la Isla, dijo que ese decreto ampliado en abril de 1999, es el «problema principal que enfrentan nuestros acuerdos».
En tanto, William Brownfield, Subsecretario de Estado Adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental y jefe de la delegaci¢n estadounidense, asegur¢ la continuidad de aplicaci¢n de la referida ley, «hasta que la judicatura o el Congreso de Estados Unidos la cambien».
Las autoridades cubanas apuntan a la Ley de Ajuste como estimulo a la emigraci¢n ilegal, debido a que los naturales de la isla son privilegiados por ella con derecho a empleo y residencia al llegar a Estados Unidos. Cubanos y cubanas pueden llegar por cualquier v¡a, en contraste con el trato que reciben emigrantes de otras nacionalidades.
La reuni¢n, que alterna su sede entre la capital cubana y Nueva York, tiene como prop¢sito revisar el cumplimiento de los acuerdos migratorios bilaterales. En virtud de esos acuerdos, Estados Unidos debe entregar cada a_o 20 mil visas a cubanos que deseen emigrar a ese pa¡s. A Cuba le toca evitar las salidas ilegales.
Estados Unidos tambi’n se comprometi¢ a repatriar a los ilegales cubanos interceptados en alta mar. Cuba a abstenerse de tomar represalias contra los ciudadanos devueltos a su territorio.
Segon fuentes oficiales, desde 1995 salieron de la Isla de forma legal 133 mil 800 personas, cifra superior a la de los que emigraron por otras v¡as, los que de acuerdo con la Ley de Ajuste Cubano pueden permanecer en Estados Unidos si logran pisar tierra. (Cu/QR/Au/Ri/pt).
Antonio Ruiz Portal