Estos ficticios hermanos no son otros que Mark Trammer a la música, más conocido como Gnac, y Roger Quigley, conocido por su apellido, a los versos y voces; en definitiva, dos almas gemelas nacidas para encontrarse en el lado más nostálgico y, por qué no, celestial del underground británico. Canciones y temas (instrumentales como «Four days» o «Low tide» son sólo Gnac) que aspiran a conmover, consiguiendolo siempre, aletargando nuestras defensas y animándonos a, repetidamente, beber en música que es todo clasicismo, eternidad, atemporalidad. Si Gnac recordaba a Pascal Comelade o Nyman, en Montgolfier Brothers circula la misma savia, pero con el añadido de la voz grave de Roger Quigley, un pequeño genio errante del pop que provoca romanticismo allá donde pisa, con una voz que más que cantar narra, pero, de nuevo, conmueve. Sin prisas, aliados con el pormenor de cada momento, «Seventeen Stars» no es más que belleza disfrazada de un pop sin época, casi sin futuro, posiblemente dueño del pasado, pero sumamente memorable, como apuntan «In walks a ghost», «Even my mind can’t tell you» o la cima de emoci¢n que es «Between two points». Otra de esas reediciones sobre discos del pasado a_o que se han realizado en los oltimos meses (Cousteau de la mano de Palm Skins, The Aluminum Group por obra y gracia de Primeros Pasitos) que demuestran cu l es, ahora mismo, la mosica real. Otros permanecen sordos y no disfrutan de esta precioso pop de c mara.
tMONTGOLFIER BROTHERS y GNAC actuar n en el Festival Tanned Tin 2000 el pr¢ximo s bado 11 (00:15 horas) t