MUJERES POR LA DEMOCRACIA se solidariza con las familias de estos trabajadores peruanos que han perdido sus vidas mientras cumplían su deber de custodiar un bien publico y con todos los heridos.
La lucha por la democracia a la que aspiramos, no tiene la más mínima complicidad con hechos de esta naturaleza, ni ambig³edades frente a quienes los causan.
Sin embargo, es nuestro derecho preguntarnos +de dónde proviene en última instancia la violencia? +No es acaso de este régimen que ha quebrado toda legalidad y hoy se reviste de un poder ilegítimo? ¿Quiénes podrían estar más interesados en tergiversar el sentido de las movilizaciones pacificas y multitudinarias realizadas en el marco de la Marcha de los 4 Suyos? +A quiénes beneficia asociar el legitimo derecho ciudadano a la expresión y movilización con el caos y la violencia? ¿Quiénes -con perversidad- estarían estimulando la sensación de desamparo de los ciudadanos con el propósito de someterlos más fácilmente?
Los acontecimientos del 28 de julio no pueden vincularse a las pac¡ficas y masivas jornadas de protesta por el ileg¡timo tercer per¡odo consecutivo del ingeniero Fujimori; del pedido de nuevas elecciones; del rechazo a Montesinos.
La situaci¢n que vivimos es sin duda altamente conflictiva y polarizada. Por eso, las fuerzas democr ticas debemos seguir ejerciendo una profunda pedagog¡a no violenta, expresada en todas y cada una de nuestras manifestaciones poblicas.
Acciones siempre sustentadas en una organizaci¢n responsable que mira el futuro, que va m s all del d¡a de hoy.
MUJERES POR LA DEMOCRACIA se reafirma en su estrategia pacifista de activa resistencia para construir la democracia en el Pero.