La Secretaria de DD.HH del PIT/CNT entregó en la Embajada venezolana, cartas de Tota Quinteros y de la propia Secretaría, donde se da cuenta al Presidente venezolano Hugo Chavez y al Ministro de Relaciones Internacionales José Vicente Rangel, de los últimos pasos dados en torno al caso de la desaparición de la Mestra Elena Quinteros. Dichas misivas fueron acompañadas de un extenso Dossier, dando cuenta pormenorizada de las actuaciones cumplidas ante la justicia uruguaya, posteriormente a la visita a Uruguay del Presidente Chavez.
Copia de la mencionadas misivas.
Montevideo, 10 de noviembre de 2000
Excelentísimo
Sr. Presidente de la
República Bolivariana de Venezuela
Hugo Chávez Frías
Presente
De mi mayor consideración:
A través de estas líneas quiero expresarle mi reconocimiento y gratitud por la gestión por Ud. realizada ante el Sr. Presidente Jorge Batlle en relación a la verdad sobre el destino de mi hija Elena Quinteros, secuestrada en los jardines de la Embajada de vuestro pa¡s que en forma humanitaria y solidaria abr¡a sus puertas para salvarla del horror. El Sr. Ministro Jos’ Vicente Rangel lo pondr al tanto de las oltimas novedades acerca de las instancias judiciales y administrativas que he intentado a fin de resguardar el derecho que tengo a saber el destino de mi hija. Pero perm¡tame, Sr. Presidente, hacer expresa menci¢n a un gesto suyo que en su sencillez contiene la grandeza y el calor humano que ahora se, integran sus rasgos. Nuestro encuentro a las puertas del Hotel donde Ud. se alojaba en oportunidad de su visita a mi pa¡s, fue totalmente casual. Ya hab¡a sido recibido atentamente por el Sr. Rangel al cual le hab¡a entregado todos los papeles. Not’ que algunos periodistas le hac¡an menci¢n sobre mi presencia junto a los dos compa_eros que estaban conmigo. Hace 24 a_os que recorro y busco en oficinas, foros, juzgados, cuarteles, ministerios, organismos; en mi pa¡s y en el mundo entero. La indiferencia de los gobernantes nacionales fue una de las cosas que mas han dolido a los familiares de desaparecidos, nunca fui recibida, hasta ahora, por ningon presidente, por ningon ministro, por alguna instancia oficial que al menos admitiese el dolor humano que esto implica. No fue menor para mi, que Ud. se acercase a preguntarme si hab¡a ido a verlo y dispusiese cinco minutos para escucharme. Me sent¡ francamente aliviada, reconfortada. Mas emocionada aun cuando Ud. me pidi¢ la bendici¢n. No solo me escuch¢ sino que me distingui¢ con su pedido.
Desgraciadamente no he podido saber nada sobre mi hija, y nuevamente apelo a vuestra solidaridad y grandeza para redoblar los esfuerzos. Puedo asegurarle que todo lo que hagamos por la verdad no solo concierne a esta se_ora de 82 a_os sino a toda nuestro pueblo que ha visto en Ud. a un estadista latinoamericano de gran humanidad que merece nuestro respeto.
Reciba un beso y nuevamente, mi bendici¢n.
Mar¡a del Carmen «Tota» Almeida de Quinteros
Montevideo, 10 de noviembre de 2000
Ministro de Relaciones Exteriores de la
Repoblica Bolivariana de Venezuela
Sr. Jos’ Vicente Rangel Vale
Presente.
De mi mayor consideraci¢n:
He demorado la respuesta a vuestra atenta misiva del 9 de mayo del 2000 donde Ud. me pone al corriente de la gesti¢n realizada por el Presidente Hugo Chavez ante el Dr. Jorge Batlle. En parte la demora se ha debido a ciertos problemas de salud que me impusieron un par’ntesis y tambi’n porque mis expectativas estaban puestas en la instancia judicial que abr¡ ante el Juzgado de lo Contencioso Administrativo a trav’s de mi abogado Dr. Pablo Chargonia y con el apoyo de la Secretar¡a de DDHH de la central onica de trabajadores PIT-CNT. Hice uso del Recurso de Amparo solicitando se me amparase en el derecho de informaci¢n acerca de lo ocurrido con mi hija Elena Quinteros, a prop¢sito de las declaraciones de un ex – soldado que se present¢ espont neamente ante el Presidente de la Suprema Corte de Justicia a testimoniar con eventuales pruebas sobre el paradero de mi hija. En decisi¢n hist¢rica para la jurisprudencia uruguaya la Juez Dr. Estela Jubette sentenci¢ ampar ndome y exigiendo al Poder Ejecutivo la investigaci¢n sobre el caso de mi hija. Esta sentencia fue apelada por el Ministerio de Defensa, pero ratificada por unanimidad por el Tribunal de Apelaciones. Con lo cual, el Poder Ejecutivo se vio intimado a realizar una investigaci¢n administrativa, la cual ha finalizado en estos d¡as. Desgraciadamente es una investigaci¢n acotada y superficial que no cumple con lo ordenado por la Justicia, con lo cual estoy nuevamente desolada y volviendo a empezar.
Ruego a Ud. mantener informado al Sr. Presidente Hugo Chavez, y trasladarle mi gratitud y reconocimiento por el gesto de humanidad en recibir y escuchar mi reclamo. Debo decir que a pesar de todos estos esfuerzos sigo sin saber el paradero de Elena que fue secuestrada desde territorio venezolano. Reciba Ud. mi personal reconocimiento a su persona y su gesti¢n, la cual descont bamos dada su trayectoria, pero que no por ello ha sido menos gratificante. Adjunto a esta misiva una carta dirigida al Sr. Presidente Hugo Chavez, que quiero hacerla llegar a trav’s suyo, as¡ como un «Dossier», conteniendo los documentos relativos a las oltimas instancias cumplidas con relaci¢n a este hecho.
Mar¡a del Carmen (Tota) Almeida de Quinteros
Montevideo, 10 de noviembre de 2000
Ministro de Relaciones Exteriores de la
Repoblica Bolivariana de Venezuela
Sr. Jos’ Vicente Rangel Vale
Presente.
De nuestra mayor consideraci¢n:
Hemos tomado conocimiento de vuestra atenta misiva del 9 de mayo del 2000 donde Ud. pone al corriente, de la Sra. Mar¡a del Carmen Almeida de Quinteros, de la gesti¢n realizada por el Presidente venezolano Sr. Hugo Chavez ante el Dr. Jorge Batlle. Como Ud. recordar en oportunidad de visitar Ud. y el Presidente Chavez nuestro pa¡s, acompa_amos a la Sra. Tota Quinteros, en representaci¢n de la central sindical uruguaya (PIT/CNT), a la entrevista que ella mantuvo con Ud. y el propio Presidente venezolano. De acuerdo a los oltimos acontecimientos relativos a las acciones judiciales que se iniciaron en el pa¡s para lograr tener una repuesta sobre el paradero y las circunstancias de la desaparici¢n de la maestra Elena Quinteros, el Secretariado Ejecutivo del PIT/CNT, resolvi¢ acompa_ar las cartas personales que remite la Sra. Quinteros a Ud. y al Presidente Chavez, con una nota del movimiento sindical uruguayo. En la misma, quienes hemos acompa_ado y apoyado a la Sra. Quinteros en este – hasta ahora fallido intento de terminar con las angustias de esta madre que busca desde hace 24 a_os a su hija desaparecida -, queremos adem s de informarle sobre los oltimos acontecimientos expresarle que tanto la Sra. Quinteros como nosotros estamos dispuestos a recorrer todos los caminos posibles y necesarios para lograr una repuesta satisfactoria a este reclamo humanitario y ‘tico.
Una lectura del «Dossier» que hemos preparado para darle cuenta de esos hechos a que hacemos menci¢n, seguramente lo llevara a Ud. a concluir- como lo hemos hecho nosotros -,que la voluntad del Estado uruguayo es continuar ocultando toda informaci¢n que sobre la desaparici¢n de la maestra Elena Quinteros tienen tanto civiles como militares de nuestro pa¡s.
Resulta por dem s alarmante esta situaci¢n, ya que ella conlleva tambi’n el incumplimiento de los compromisos que asumi¢ el Uruguay ante Venezuela, cuando se reanudaron las relaciones diplom ticas que justamente se hab¡an interrumpido por el secuestro de Elena Quinteros.
El gobierno uruguayo – por las resoluciones que en su momento tom¢ el anterior Presidente Dr. Sanguinetti, como por las recientes del actual Presidente Dr. Jorge Batlle – al aplicar una Ley nacional (la ley que impide el castigo penal por casos de desapariciones forzadas de personas) a un delito que se cometi¢ en territorio venezolano, comete una antojadiza y arbitraria interpretaci¢n de la soberan¡a que tienen las distintas naciones.
En momentos que enviamos esta comunicaci¢n, se esta procesando en la justicia uruguaya una nueva acci¢n judicial intentando que el Estado cumpla con lo ordenado por un fallo judicial que lo oblig¢ a investigar el paradero y las circunstancias de la desaparici¢n de Elena Quinteros. Reciba Ud. nuestro reconocimiento a su persona y su gesti¢n, la que no nos sorprendi¢ dada su trayectoria. Agradecemos que de lo expresado mantenga informado al Sr. Presidente Hugo Chavez, a quien extendemos nuestros saludos y reconocimiento.
Raol OLIVERA ALFARO
Secretaria de DD.HH y Pol¡ticas Sociales PIT/CNT – URUGUAY