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Pequeñas joyas («A new beginning» de The Sweetest Ache, «Window pane» de Sugarplant, «Somethings never change» de Shoestrings, «Take me back to heaven» de Fat Tulips) que jamás defraudan, trozos ligeros de peso histórico pero que siguen conmoviendo a los oyentes que aman el pop frágil y las melodías claras, como dictan Mrs. Kiplings, The Pristines, Po! (preciosa su «Fay»), Bulldozer Crash, Confetti, They Go Boom!! o Slumber en las canciones que de ellos aquí se recuperan. Un recital que, como reza el subtítulo, representa al pasado pero que abre también las puertas del presente de un sello que jamás debió tomarse tanto tiempo sabático. Esperemos sus nuevas buenas. t t