En este caso fue la planta de San Telmo-Sadowa sita en la ciudad de Mar del Plata, en la costa atlántica de la provincia de Buenos Aires.
Directivos de la empresa controlada por el grupo germano Sadowa argumentaron que el cierre del establecimiento obedeció a la prohibición que la Unión Europea, Canadá y Estados Unidos impusieron a la importación de carnes provenientes de la Argentina a raíz de la enfermedad que afecta al rodeo local.
La medida adoptada por los países del Viejo Continente y los dos principales destinos de las carnes manufacturadas por el frigorífico le provocaron a la compañía una pérdida, en sus colocaciones en el exterior, cercana a los 700 millones de dólares ya que debieron inutilizar el producto preparado sumándosele la cancelación de pedidos de compradores externos.
El 85% de la producción de San Telmo-Sadowa era exportado a diversos países de la UE como asimismo a Canadá y Estados Unidos.
Los ejecutivos del frigorífico informaron que la producción que se comercializaba en los supermercados de esos destinos ya hab¡a sido retirada de las g¢ndolas.