Los sindicatos estatales de Costa Rica anunciaron una serie de
acciones de protestas antes los bajos incrementos salariales. A esto se
suma el malestar por el anunciado calendario escolar y la privatización de
los servicios públicos.
Albino Vargas, secretario general de la Asociación Nacional de
Empleados Públicos, dijo que el incremento decretado por el gobierno de
algo más del 5% cerró definitivamente el camino del diálogo y que lo que
queda son las protestas.
Por su parte el nuevo ministro de Trabajo, Bernardo Benavídez,
dijo que él personalmente está dispuesto al diálogo para impedir las
protestas en el país. Vargas rechazó la conducta autoritaria del gobierno
al decretar el incremento sin consultar a los afectados.
Al paro de los sindicatos se les podrá sumar el poderoso gremio de
los educadores, quienes están en confrontación con el ministro de
Educación, quien ordenó la ampliación del calendario escolar a 200 días
lectivos. (Cr/LP/Po-Au/Cs/mc)