En su discurso, llamó a los legisladores a flexibilizar posturas a fin de permitir que los zapatistas puedan hacer uso de la tribuna del Congreso de la Unión para dar a conocer su posición respecto a la iniciativa de la Ley de Derechos y Cultura Indígenas. El político afirmó que la tribuna más alta del país debe estar abierta para escuchar los planteamientos de cualquier grupo indígena que quiera aportar su reflexión en torno a la cuestión.
Cárdenas Solórzano, aseveró que no existe ninguna normativa legal que impida que cualquier ciudadano haga uso de la tribuna del Congreso de la Unión.
Respecto a las condiciones que impone el zapatismo para reiniciar el diálogo de paz, aseveró que el EZLN no ha hecho planteamientos nuevos y sostuvo que uno de ellos, el retiro de las bases militares de Chiapas debe darse por completo. Hecho que no significa en absoluto que esa entidad quede desprotegida, puesto que existen unas 240 posiciones militares, razón por la cual la petición de los zapatistas no alterará la tranquilidad en esa rea.