En declaraciones a Radio América, el funcionario puntualizó que «hay que avanzar de tal manera que haya una articulación absoluta entre los dos sistemas y mirando más bien la índole de la amenaza que la localización geográfica de los elementos».
Tras ello, Jaunarena advirtió que «sin inmiscuir a las Fuerzas Armadas en inteligencia dentro del territorio, tiene que haber una absoluta articulación del sistema, de tal manera que sea útil a la ciudadanía».
Reconociendo que «la inteligencia interna en un exceso de sus atribuciones» por parte de los militares «había causado mucho perjuicio a la sociedad, persiguiendo por razones políticas a ciudadanos», en alusión a lo que sucedió en la última dictadura militar.
A raíz de ese ôexceso de sus atribucionesö el llamado terrorismo de Estado hizo desaparecer, entre marzo de 1976 y diciembre de 1983, a más de 30 mil personas. Y otros varios miles fueron empujados al exilio.
Aclaración mediante, retomemos las declaraciones del Ministro de Defensa.
Empero, «ahora estamos frente a una realidad nueva. Hay agresiones como la del terrorismo que no tienen una localizaci¢n geogr fica dentro del territorio, sino que muchas veces, en realidad en la mayor¡a de ellas, los atentados se planifican afuera del territorio de un pa¡s y con c¢mplices dentro del territorio en que se producen los hechos», explic¢.
Para ejemplificarlo, recordemos que la Argentina sufri¢ dos atentados mort¡feros durante la d’cada de los 90: el primero, en febrero de 1992, con la voladura de la sede porte_a de la Embajada de Israel. Y dos a_os despu’s, en julio de 1994, el edificio de la Asociaci¢n Mutual Israelita Argentina -en la Ciudad de Buenos Aires- qued¢ reducido a escombros.
En cuanto a la participaci¢n argentina en la lucha contra el terrosismo, se_al¢ que ello «va a depender del tipo de requerimiento» que realice la administraci¢n del Presidente George W. Bush.
«No se pueden establecer criterios tajantes frente a la diversidad de situaciones que se pueden promover», puntualiz¢ Jaunarena.
Y concluy¢, subrayando que las Fuerzas Armadas argentinas «ya est n en este momento actuando (en diversos pa¡ses) en operaciones de mantenimiento de la paz», a trav’s de los Cascos Azules.