Marcelo Bertolesi, responsable de la presentación, en rueda de prensa ofrecida en la sede de la agrupación, precisó que ôexiste una escalada de intimidación que avanza y es altamente preocupante, no sólo en Capital Federal, sino que también se recibieron amenazas en Córdoba, Rosario y la Zona Norte y Oeste de la provincia de Buenos Airesö.
Al tiempo, remarcó que en los ôescrachesö realizados a quienes participaron del terrorismo de Estado y gozan de la impunidad que reina en la Argentina observaron a gente ôfilmando a los integrantes de la agrupación como si fuéramos activistas, lo cual implica una aberración jurídicaö.
Por su parte, Marta Dillon ûintegrante de la organización- manifestó que ôen Córdoba y en Rosario han aparecido publicados datos de compañeros, lo que revela la existencia un cuadro de relaciones y contactosö.
En ese sentido, H.I.J.O.S. estimó que los hechos denunciados refleja el nivel de impunidad en el que vive el país y ôque los genocidas sólo pueden ser juzgados fuera del país».
El abogado de la agrupaci¢n, Alfredo Rodr¡guez, indic¢ que si bien el Juez de Instrucci¢n nomero 12, Ricardo Arturo Warley, desestim¢ el habeas corpus -luego de que las Fuerzas Armadas y la Polic¡a manifestaran que no hab¡an librado ¢rdenes de captura contra dos de los integrantes de la organizaci¢n- evalu¢ el resto de elementos probatorios y elev¢ la causa a la C mara de Apelaciones en lo Criminal Federal.
Al considerar la C mara que las pruebas aportadas conformaban la existencia de un delito, sorte¢ el Juzgado del Fuero Federal en el que recaer¡a la causa, quedando radicada en el nomero 5, al que le deriv¢ el video y las fotograf¡as aportadas.
Rodr¡guez se_al¢ que estaban estudiando la factibilidad de acercar m s pruebas y fortalecer el pedido que se efectoen investigaciones «concretas» hacia quienes figuran en las fotograf¡as.
«Se ha pedido que se investigue si las personas que aparecen en las fotos pertenecen a la Secretar¡a de Inteligencia del Estado o a las Fuerzas Armadas. De comprobarse el primero de los casos la responsabilidad estar¡a recayendo en la Presidencia de la Naci¢n, y en el segundo en el Ministerio de Defensa», concluy¢ el letrado.