El epicentro fue localizado en la población de San Vicente, a unos 60 kilómetros al este de San Salvador. El Centros de Investigaciones Geotécnicas de El Salvador ha calificado a este fenómeno como de «enjambres sísmico».
Estos temblores no fueron los únicos en las últimas 24 horas. En la playa La Zunganera, a 90 kilómetros al sur de la capital y otros puntos en la costa del Pacífico de este país centroamericano también sufrieron movimientos sísmicos, que aunque no produjeron víctimas, causaron pánico entre la población.
El país fue devastado a inicios de año por dos grandes terremotos. El primero tuvo una magnitud de 7,9 grados y se produjo el 13 de enero, el segundo ocurrió el 13 de febrero con una intensidad de 7,6 grados en la escala de Richter. Se contabilizó 1.142 víctimas, 200 mil viviendas destruidas, un millón 300 mil damnificados y pérdidas por mil 700 millones de dólares. (Sv/LY/Nt/Dn/mc)