ôPALABRA DEL COMANDANTE ZEBEDEO
A los jóvenes estudiantes, maestras, maestros y trabajadores,
En el nombre de la delegación del Comité Clandestino Revolucionario Indígena- Comandancia General del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (CCRI-CG- EZLN) saludamos sus convicción y su comprensión de colaborar para alcanzar el reconocimiento constitucional de los derechos indígenas, suspendiendo sus clases a los jóvenes. Agradecemos respetable profesores, alumnos, alumnas y trabajadores sus decisión de sacrificar sus tiempo suspendiendo labores por nuestra estancia en este plantel.
Por el suspenso no es nuestra culpa que fue así. Es el gobierno anterior y actual que no tuvo y que no tienen voluntad de resolver los problemas que sufrimos los pobres.
El tema que estamos demandando sobre derecho y cultura indígena ya tiene 5 años que se firmaron. Hasta ahora sigue incumplida. Siguen poniendo trabas para que no tengamos ese derecho. Nosotros no somos intransigente, nosotros no somos los que alargamos el tiempo. Si ellos hubieran cumplido su palabra, si no hubieran violado su firma y sus leyes M’xico ya estuviera viviendo la paz, ni estuvi’ramos perdiendo sus tiempo.
Con este nuevo gobierno, otra vez nos intenta marear con palabras de cambio en M’xico, que son las mismas oxidadas y de la misma actitud de doble lenguaje.
Les hacemos un llamado de no permitir entrar aserr¡n en sus cabezas, de seguir luchando juntos con nosotros hasta alcanzar que las demandas que impulsaron nuestra rebeld¡a.
As¡ de todo coraz¢n, esta delegaci¢n agradecemos respetuosamente que nos dieron este espacio donde posar y nos sentimos muy contentos con ustedes.
PALABRA DEL COMANDANTE TACHO
HERMANOS Y HERMANAS DE LA COMUNIDAD DE LA ENAH:
A los maestros y maestras,
A los estudiantes todos y todas,
A los hermanos y hermanas trabajadores,
Hermanos todos.
El d¡a de hoy queremos decirles nuestra palabra para que tambi’n ustedes sepan los motivos por la cual nos encontramos en su escuela, en su casa, en la casa de todos los que dignamente trabajan, estudian ense_an sus conocimientos espl’ndidos del saber.
Cuantos deseos tienen nuestros pueblos ind¡genas de todo M’xico de tener una escuela de este nivel para tener m s conocimientos, adem s de lo que ellos y ellas ya saben, tienen conocimiento de vida de m s de 508 a_os y en una escuela como esta les ayudara para terminar y completar una tesis. La educaci¢n es tambi’n una de nuestras demandas, pero entonces ese deseo ser para nuestros pueblos ind¡genas de M’xico un nuevo d¡a.
Pero en cambio hoy estamos demandando el cumplimiento de 3 se_ales m¡nimas, el retiro y cierre de 3 posiciones del Ej’rcito Federal Mexicano que faltan de las 7 planteadas; la liberaci¢n de los injustamente presos de las c rceles de Chiapas, Tabasco y Quer’taro; y la aprobaci¢n de la iniciativa de COCOPA (Comisi¢n de Concordia y Pacificaci¢n) y el reconocimiento constitucional de los Derechos y Cultura Ind¡gena pactadas en San Andr’s.
Estas 3 se_ales, hasta el d¡a de hoy no se han cumplido. No hemos recibido por parte del Sr. Fox una respuesta que ayude a la construcci¢n del camino del di logo.
A cambio de ‘stas 3 se_ales m¡nimas hemos escuchado, palabras huecas, palabras mentirosas, palabras enga_osas transmitidas por todos los medios de comunicaci¢n.
Para enga_ar y mentirle al pueblo de M’xico y el mundo diciendo que nosotros los delegados zapatistas somos los intransigentes.
S¢lo queremos decirles que no se dejen enga_ar, nosotros los zapatistas, el EZLN seguiremos insistiendo, manifestaremos las veces que sea necesario nuestra voluntad al Di logo, siempre y cuando no sea bajo amenaza, bajo humillaci¢n y burla porque a esas que quieren humillaci¢n y burla que sepan que no lo van a conseguir jam s.
Cuicuilco, D.F., Campus ENAH, 18 de marzo del 2001.
PALABRA DE LA COMANDANTE ESTHER
Hermanos y hermanas,
Maestros, estudiantes trabajadores
Queremos decirles como mujer que nos ayuden y que nos apoyen con nuestra lucha ya que ustedes han avanzado un poco que tuvieron la oportunidad de hacer esa especialidad que tienen cada uno de ustedes.
Vemos que es importante unir nuestra voz y nuestra fuerza, hoy la situaci¢n de la mujer sigue siendo dif¡cil, seguimos ocupando el rinc¢n como cualquier cosa, especialmente a las mujeres ind¡genas porque no tenemos la especialidad como la tienen ustedes. Sufrimos el olvido, la humillaci¢n y la pobreza. Somos las que estamos tres veces m s en la opresi¢n. Por eso decimos ¥ya basta! ¥ya basta de tanta injusticia! Queremos la justicia, lo que por derecho merecemos como seres humanos. Tenemos la esperanza que vamos a lograr un M’xico Nuevo con la participaci¢n de todos los hombres, mujeres y ni_os del pueblos mexicano.
Nosotras las mujeres zapatista hemos tenido un poco de avance, ocupamos los diferentes responsabilidades y de autoridad pero sabemos que hay muchas mujeres todav¡a que falta que se despierten y falta que vean la realidad. Por eso lo invitamos que luchemos todos juntos para lograr la democracia, libertad y justicia.
Palabra del Comandante David
Hermanos, hermanas, compa_eros y compa_eras estudiantes, maestros y trabajadores.
Hermanos y hermanas que nos acompa_an en este acto.
Hermanos todos: A nombre de toda la delegaci¢n del EZLN quiero hablarles algo sobre la vida y la situaci¢n de los pueblos ind¡genas.
Ahora m s que nunca nos hemos dado cuenta que la situaci¢n, las condiciones de vida y el sufrimiento de los pueblos ind¡genas de Chiapas no es diferente que la vida y la realidad de los pueblos indios de todo el pa¡s.
Durante nuestra marcha de la dignidad ind¡gena en los distintos estados y nuestra estancia en esta capital mexicana, miles de voces y reclamos han llegado en nuestros o¡dos y en nuestro coraz¢n; demandas de justicia, libertad y respeto de miles y millones de hermanos y hermanas ind¡genas, campesinos, obreros, maestros, estudiantes, artistas, amas de casa y muchos otros m s. Todas esas personas honestas y dignas han hecho suya nuestra causa y han entendido que el reconocimiento constitucional de los derechos y cultura ind¡genas es el comienzo de la construcci¢n de un M’xico nuevo, justo, democr tico, que incluye a todos sin racismo ni discriminaci¢n a los que fuimos primeros en habitar estas tierras, es decir, a todos los ind¡genas, que segon ahora las cifras mal contabilizadas en las m quinas modernas, las computadoras y otros medios modernos, somos diez millones de indios dispersos en todo el territorio mexicano, que casi el cien por ciento vivimos en la completa marginaci¢n, en la extrema pobreza y en el olvido despojados de nuestras tierras y de nuestra riqueza, sin contar con los servicios m s indispensables: salud, educaci¢n, vivienda digna y sin alimentaci¢n por la falta de tierra y de trabajo digno. Y cuando reclamamos nuestros derechos, cuando pedimos libertad, justicia y respeto nos reprimen, nos persiguen, nos encarcelan y nos matan.
Por ser ind¡genas y pobres no les queda m s que callar, resignarse, soportar y someterse bajo las leyes y ¢rdenes de los poderosos representados por los que se dicen gobernar al pa¡s.
De esta manera se cierra toda posibilidad de luchar por v¡as pol¡ticas y pac¡ficas.
Fueron, pues, estas las razones por las que los zapatistas decidimos tomar las armas, no nos dejaron otro camino m s que luchar con las armas por Democracia, por Libertad y por Justicia para todos».