Pero, antes de pasar a la negativa zapatista vale la pena, dar cuenta de cómo en el seno del Congreso se llegó a la controvertida propuesta, es decir, ahondaremos, brevemente, en la dinámica de la discusión llevada adelante por las diferentes fracciones políticas que componen el Congreso mexicano, a fin de poder tener un conocimiento de las acciones desplegadas por los diferentes actores, cuanto así de las estrategias, que solamente cobran sentido en el entramado de relaciones en que se encuentran.
Pues bien, los Coordinadores de las fracciones parlamentarias del Partido Acción Nacional (PAN) del Partido Revolucionario Institucional (PRI) del Partido de la Revolución Democrática (PRD) y del Partido Verde Ecologista de México de ambas Cámaras del Congreso, y los integrantes de la COCOPA, el mismo lunes se reunieron en la sede del Senado en Xicoténcatl para discutir y determinar las pautas del encuentro con el zapatismo.
Si la intención era esa, tanto el PAN, cuanto el PRI impusieron la dinámica de la discusi¢n al llegar con una propuesta ya elaborada. Los Coordinadores de estos dos partidos pol¡ticos en la C mara de Senadores, Enrique Jackson (PRI) y Diego Fern ndez de Cevallos (PAN) lograron imponer su criterio. Cuesti¢n que caus¢ el rechazo de los dem s institutos pol¡ticos.
Se preguntar el lector en que consiste la iniciativa de los pol¡ticos del PAN; partido de Gobierno, y del PRI, oposici¢n. Ambos propusieron que el EZLN, sea recibido y escuchado solamente por la subcomisi¢n dictaminadora, de la ley ind¡gena, del Senado -ya conformada- cuanto as¡ su similar de la C mara de Diputados. Vale decir, diez Senadores y diez Diputados -a cargo del dictamen- representar n al Congreso de la Uni¢n en la instancia de di logo.
Tal cuesti¢n fue rechazada de plano por el PRD. En tal sentido, el Coordinador de los senadores del PRD, Jesos Ortega, y el de los Diputados del mismo instituto pol¡tico, Mart¡ Batres, plantearon que los zapatistas deb¡an ser recibidos y escuchados por el Pleno de los integrantes de las Comisiones Unidas del Congreso. Puesto que de otra manera, implicar¡a lisa y llanamente «regatear el espacio de interlocuci¢n a los zapatistas».
A esto respondi¢ el Coordinador de los Senadores del PAN, Diego Fern ndez de Cevallos, quien reiter¢ que solamente debe «darse su lugar» a la subcomisi¢n dictaminadora.
En el fragor de la discusi¢n, se impuso, como no pod¡a ser de otra manera, la voluntad de la mayor¡a conformada por el PRI-PAN. No obstante, la propuesta final que la COCOPA, entreg¢ al zapatismo, incluye un punto en el cual se aclara que adem s de los que se designan para participar en el di logo, tambi’n podr n asistir todos aquellos parlamentarios que se encuentren interesados en la cuesti¢n.
Aclaremos porque hemos dicho, «como no podr¡a ser de otra manera». La respuesta es sencilla, el PRI, que gobern¢ el pa¡s (hasta la asunci¢n, el pasado mes de diciembre, de Vicente Fox del PAN ) fue el instituto pol¡tico que incumpli¢ los acuerdos de San Andr’s Larr inzar suscritos en febrero de 1996 con el zapatismo, entre cuyos puntos de encuentra la Ley sobre Derechos y Cultura Ind¡genas. Un punto a tener en consideraci¢n es que esos acuerdos fueron el producto de meses de foros de consulta y negociaciones.
En tanto, desde el PAN diversos parlamentarios de esa fracci¢n, desde el mismo momento en que Fox enviara la iniciativa de ley al Congreso de la Uni¢n, vienen desplegando una serie de estrategias tendientes a obstaculizar su aprobaci¢n. Argumentando que, tal como se encuentra la misma, no puede ser aprobada, dado que amerita se realicen profundos cambios -en palabras del propio Fern ndez de Cevallos- en particular en lo que respecta a la cuesti¢n de la autonom¡a de las comunidades ind¡genas, puesto que se debe dejar «bien en claro el respeto al nivel municipal».
No olvidemos que varios parlamentarios al referirse al punto de la autonom¡a ind¡gena han indicado que la misma podr¡a provocar una balcanizaci¢n en el pa¡s.
El mismo Fox, por su parte, ha hecho gala, en todo este tiempo, de un discurso cargado de ambig_edad. Por un lado, declama que est dispuesto a hacer todo lo que est’ a su alcance para abrir el camino al di logo. Por el otro, no cumple con todas las demandas que el zapatismo le reclam¢ para emprender las conversaciones. Si bien ha dado paso a algunas de ellas resta aon la liberaci¢n de los zapatistas que permanecen encarcelados, y que concluya el retiro de las tropas militares de tres posiciones en el estado de Chiapas.
Al concluir la reuni¢n, el diputado Batres, en breve contacto con la prensa no pudo ocultar su molestia. En ese sentido, asever¢ que los panistas y pri¡stas, con la posici¢n adoptada, cerraron la posibilidad de que se produzca un encuentro con todas las comisiones dictaminadoras en el Pleno del Congreso.
»Pretenden realizar una reuni¢n casi imperceptible o clandestina», enfatiz¢ el congresista.
El d¡a martes, el diputado del PRD y tambi’n integrante de la COCOPA, Emilio Ulloa P’rez, acus¢ a los Coordinadores del PRI, Enrique Jackson y del PAN, Diego Fern ndez de Cevallos en la C mara Alta, de «torpedear» el di logo con los zapatistas.
El legislador, asimismo, asever¢ que Jackson y Fern ndez de Cevallos en las Juntas de Coordinaci¢n, intentan «secuestrar» la aprobaci¢n de la iniciativa de Ley de Derechos y Cultura Ind¡gena.
Ulloa P’rez calific¢ de «intolerante» la actitud asumida por los coordinadores de PRI y PAN, quienes a su entender intentan «darle un bajo nivel al encuentro entre el EZLN y el Congreso».
A esto sali¢ a responder el Coordinador de los Diputados del PAN, Felipe Calder¢n Hinojosa, quien asever¢ que tal acusaci¢n era falsa, y aclar¢ que no se hab¡a revocado o modificado la disposici¢n de escuchar a los zapatistas.
Asimismo y refiri’ndose al diputado Batres (PRD) recalc¢: «Me parece una gran inmadurez de parte de Mart¡ Batres que se haya callado a la hora que est bamos tomando el acuerdo, que fue apoyado por el Coordinador de los senadores perredistas, Jesos Ortega, por los perredistas que son miembros de la COCOPA y, a espaldas de nosotros, haya hecho declaraciones que falsean lo dicho en la reuni¢n y desacreditan toda la intenci¢n del Congreso».
Lo expuesto, entonces, da al lector un somero panorama del entramado de relaciones de poder que se est n jugando en la cuesti¢n. El PAN y el PRI, que en lo discursivo aburren con sus mutuas acusaciones, han encontrado un punto de encuentro, el entramado de relaciones, como ya mencion ramos, en la reuni¢n cobraron sentido, juntos, gobernantes y opositores nuevamente han puesto una piedra en la senda del di logo.
Nos resta ahora comentar la negativa zapatista, tal como se puede leer en el t¡tulo que hemos puesto a esta nota, el EZLN, ha rechazado por «rid¡cula», «humillante» e «indigna» la propuesta. En rueda de prensa, ofrecida la noche del martes, el Subcomandante Marcos demand¢ que el di logo con el Congreso se de con todos los legisladores y todas las comisiones que componen ese poder del Estado.
El insurgente, indic¢ que la propuesta que el d¡a lunes les hiciera entrega la COCOPA, es un mero an¢nimo, puesto que no lleva «ni membrete ni firma».
«En una evidente falta de respeto, el documento entregado no tiene membrete alguno ni firma, como si fuera un an¢nimo o dejara abierta la posibilidad de negar su autenticidad», indic¢ Marcos. Seguidamente agreg¢ que si el documento fuera aut’ntico, el EZLN «rechaza el formato propuesto». Puesto que el mismo es el fiel reflejo de que «los legisladores no escuchan el clamor del pueblo de M’xico y de la opini¢n poblica nacional e internacional, y que hay un intento por reducir la dimensi¢n hist¢rica de la movilizaci¢n nacional e internacional».
En otro tramo de su contacto con los medios de comunicaci¢n, Marcos asever¢ que la propuesta es la cristalizaci¢n «del triunfo de los sectores m s duros en el Congreso, que pretenden torpedear el proceso de di logo aon antes de que se inicie, tronarlo antes de que llegue al Congreso, acorralar al EZLN en una posici¢n intransigente y dejar pospuesto lo impostergable: el reconocimiento constitucional de los derechos y la cultura ind¡genas»
«El perfil de la propuesta es muy bajo y no se puede admitir. La propuesta es humillante e indigna. Relega un reclamo hist¢rico al nivel de comparecencia de funcionario de segunda categor¡a. Ignora las condiciones del pa¡s. Frente a un consenso nacional, es poco serio que el Congreso salga con la propuesta de reuniones en lo oscuro», remarc¢ Marcos, quien agreg¢: «no aceptamos un di logo vergonzante con el Poder Legislativo, limitado a un rinc¢n y con un reducido grupo de legisladores cuya funci¢n ser¡a evitar que el Congreso Nacional Ind¡gena y los zapatistas puedan dialogar con todo el Poder Legislativo. Porque es necesario recordar que las leyes son hechas por los plenos de las dos c maras y no s¢lo por 10 diputados y 10 senadores».
El l¡der zapatista, extern¢ que el grupo insurgente reclama un di logo con todos los congresistas «incluso con aquellos que han manifestado abiertamente en contra de la ley COCOPA y nos han amenazado de distintas maneras, y con las comisiones encargadas de los dict menes. El di logo con los legisladores debe darse. Por esto el EZLN demanda el uso de la palabra en el pleno del Congreso de la Uni¢n. El EZLN ha realizado las consultas pertinentes con especialistas en jurisprudencia y no existe ninguna traba legal».
Marcos record¢ que hab¡a antecedentes de que se ha hecho «uso de la tribuna por parte de no legisladores. Tanto dignatario extranjeros como mexicanos lo han hecho. Entre ellos, Gregorio ‘Goyo’ C rdenas», y se_al¢ que la clave es solamente un acuerdo parlamentario, puesto que no existe ningon art¡culo que lo prohiba.
«Sabemos que dentro del Congreso existe el temor de que si el EZLN hace uso de la tribuna, hable contra el Congreso o que llame a la insurrecci¢n. El EZLN va a explicar a los legisladores las bondades de la ley COCOPA y a resolver sus dudas y escuchar sus comentarios. El EZLN no va a suplir al Congreso en sus tareas», aclar¢.
Reclam¢ al Congreso de la Uni¢n que «no rehuya su compromiso con el reconocimiento constitucional de los derechos y la cultura ind¡genas y con el proceso de paz. El Congreso debe decidir si enfrenta la demanda del reconocimiento constitucional de los derechos y la cultura ind¡genas como un asunto prioritario o decide posponerlo como si fuera algo secundario. La propuesta recibida refleja que no hay inter’s ni disposici¢n».
De manera categ¢rica advirti¢, «si el Congreso no ve lo que el pa¡s demanda, +entonces qui’n lo har ?. Significar¡a el divorcio total entre el Poder y la Naci¢n».
Al referirse al Presidente Fox, afirm¢ que en cuanto a lo que a ‘l compete «se devela la trampa de su supuesta ‘buena disposici¢n’. Lo de condicionar el retiro militar a los resultados del di logo con el Congreso es violar la divisi¢n de poderes y es una amenaza abierta en contra del EZLN».
En la oltima parte de la conferencia, solicit¢ a la COCOPA, «que se mantenga al margen, porque se ve que quieren reventarla us ndola de recadera de mensajes insultantes y an¢nimos, en lugar de darle el lugar, que nosotros s¡ le damos, de coadyuvante en el proceso de paz». Y concluy¢, indicando que el EZLN «mantendr contactos con la COCOPA a trav’s de su enlace, el Arquitecto Fernando Y nez, y buscar nuevas v¡as para dialogar con el Congreso de la Uni¢n».