Con esta medida, que afectó a 99 operarios y 12 administrativos, la plantilla laboral quedó reducida en casi 50%. La empresa, que desde 1999 le proveía de motores diesel a la automotriz de origen italiana, ya había empezado ûen 1998- un proceso de suspensiones y despidos, implementando también un fuerte recorte en los salarios.
Si bien oficialmente la empresa no informó acerca del pago de las indemnizaciones, trascendió que la intención sería abonar el 50%, lo que ya fue rechazado por el sindicado que representa a los trabajadores de Perkins.
En ese sentido, el representante gremial de la firma, Santiago Flores, anticipó que se adoptarán ôtodas las medidas necesarias ante la arbitraria medida adoptada por una patronal que no reconoció el esfuerzo que hacen los trabajadores con rebajas salariales, suspensiones sin cobro de haberes y retraso en el pago del medio aguinaldoö.
Las autoridades sindicales le solicitaron al Gobernador del distrito, el peronista José Manuel de la Sota, que intercediera ante los empresarios para que se revirtiera la medida, como asimismo han pedido que se concretara una audiencia en la cartera laboral de la provincia en la que participar¡an ambas partes en conflicto.