El comandante policial dijo a los periodistas que fueron las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia las que presionaron a los cocaleros para que se trasladaran a Tibúkm, al noreste de Bogotá, para generar actos vandálicos.
El jefe policial dijo que los paramilitares están molestos porque se les está «atacando el bolsillo» con la destrucción de su fuente de financiación. El general de la policía colombiana dijo que la acción paramilitar fue en represalia porque la fuerza antinarcóticos fumigó 7 mil 500 hectáreas de coca, materia prima de la cocaína. Asimismo, destruyó más de 105 laboratorios para procesar coca.
Durante los disturbios se identificó a 3 personas que promovían las protestas y que estarían vinculadas de manera directa a los grupos paramilitares de ultraderecha, Autodefensas Unidas de Colombia. Los campesinos alentados por los cabecillas de la protesta saquearon víveres e incendiaron un local donde se guardaba glifosato, el herbicida utilizado para la fumigación. (Co/YZ/Pm-Ca-Pl/Dg-Am/pt).