Y vaya camino. «Real Seasons Make Reasons» se ha convertido en los últimos meses en uno de mis discos de cabecera, en uno de esos trabajos que llegan por la puerta pequeña y crecen tanto que no hay puerta por donde sacarlo, de lo grande que se convierte. Folk contemporáneo, sin la estirpe country que caracteriza a sus similares del otro lado del charco, pero con un toque a lo Chet Baker que eriza al más insensible. Grabado con ductilidad por su hermano Fabrice, con un tono vivo distinto al directo, doméstico pero no precario, DON NINO confunde maravillosamente el estigma del cantautor folk con hormas del pop, tiras de jazz y retazos de bossa agridulce. Si Jay-Jay Johanson no conociera la electrónica, hubiera nacido en Omaha y jamás hiciera oposiciones a popstar, entonces tendría alguna oportunidad de llegarle a DON NINO a la altura de los tobillos. Otra vez a ras de la tierra, pero enorme.
Jesús Castillo