Dot Allison se dio a conocer a principios de los 90’s gracias a One Dove, una banda de dream-pop que cautivó a la crítica especializada con destellos de luminosidad propia de la época dorada del indie, un conjunto de temas que no obtuvieron la repercusión que merecía en su momento y que ahora proyectan a la cantante, ya en su vertiente en solitario, por el valor añadido de aquel «Morning Dove White», un álbum de sonido orquestado y que ya por aquel entonces fue producido por el prestigioso Andrew Weatherall, un dato significativo de la inquietud precoz y la amplitud de miras de la artista. Así pues, tras la disolución del grupo y después de un largo paréntesis de silencio musical, su aparición estelar en el mercado musical no llegó hasta el año 1999, con motivo de sus aportación a otras bandas mediante colaboraciones con otros artistas de la talla de Arab Strap y Death in Vegas, para posteriormente ver editado «After Glow», su obra magna junto a el buscado «Morning Dove White» de los desaparecidos One Dove.
Toni Rubies