En febrero de 1994 apareció, incluido dentro de la etiqueta post-rock (que en UK englobaba a bandas tan dispares como Stereolab, Pram, Main o Bark Psychosis), uno de los álbumes más originales, estimulantes y valientes de la década de los 90. «DI Go Pop» (Rough Trade, 1994) fue la confirmación de la nueva dirección tomada dos años antes por Disco Inferno, desde el single «Summer Last Sound» (Cheree, 1992), mediante el uso y abuso del sampler como una nueva vía de catálisis de sus filias (Joy División/New Order), fobias y otros desordenes. «Sobre-estimulación caótica» la llamó la publicación Obsessive Eye. DI saltaron al vacío en un ejercicio de détournement y acabaron estrellándose a toda velocidad ante la indolencia del público y de su discográfica. Un negocio musical basado en la rentabilidad y el hype más que en la calidad de sus propuestas fue asfixiando a la banda durante el siguiente año y medio, en el que tan solo pudieron editar un par de fantásticos Eps, y grabar un nuevo álbum («Technicolor») que vio la luz meses después de que se separasen en otoño de 1995.
Inmediatamente después de la disolución IAN CRAUSE, profundamente afectado, inauguró un nuevo proyecto, entonces llamado Floorshow, con el que después de algunas idas y venidas, grabó una colección de canciones presuntamente dirigidas a formar un nuevo álbum. Ni el proyecto ni el álbum progresaron y aquellas composiciones se retiraron, al igual que su autor, decepcionado una vez más, centrado en el estudio de la poesía de William Blake y en llevar una vida ‘normal’ lejos de la ruina moral y económica del pasado. Un nuevo EP de Disco Inferno, «The Mixing It Session» (Tugboat Records, 1999), unas grabaciones para la BBC de 1995, despertó un renovado interés por Crause y por su antigua banda. Le siguió la publicación de dos de los temas de las sesiones con Floorshow, pero esta vez bajo el nombre de IAN CRAUSE, en un single llamado «Elemental» (Tugboat Records, 2000), precedido de un breve concierto de presentación en Londres en noviembre de 2000. Ahora nos llega un nuevo single, cercano a su antecesor y grabado expresamente para Acuarela, titulado «Head Over Heels» (Acuarela, 2002), tres excelentes y adictivos pedazos de pop con la tecnología utilizada ahora sólo para perfilar las composiciones, siguen el camino emprendido por su autor tiempo atrás dando una vuelta más a su fijación por New Order/Joy Division pero de una forma más personal, con su voz más presente que nunca y una producción más clara. Dicho single parece confirmar la vuelta de IAN CRAUSE a la actividad musical, reclamada por bandas como Hood o Piano Magic, y esta vez quizás sea para quedarse.
Jesús Castillo