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Mecerse entre las notas de «Charlotte» o «Suzanne», acomodarse entre «On the low» o «Around my smile», significa adentrarse en las peculiaridades de un sonido que sólo remite a la poesía, deudor de un halo mágico y una voz que sublima lo que rodea, que convierte en oro la plata. Con esas eternas reminiscencias jamas inagotables del lado plácido de la Velvet, Hope Sandoval & The Warm Inventions han debutado con uno de los discos imprescindibles del 2001, un mosaico precioso que huye de la moda, de los tiempos presentes y del rugir del día a día para seducirnos con un sonido clásico, imperecedero y bello como pocas cosas en el mundo. Una delicia que no necesita palabras para enamorar. Como una mirada.