En las calles de la city porteña no sólo pudo verse a quienes pugnaban por negociar sus dólares en las casas de cambio, sino que los ahorradores atrapados en el corralito financiero aprovecharon -la asunción de Alberto Atanasof, en la Jefatura de Gabinete de Ministros; de Graciela Camaño, en la cartera de Trabajo y de Jorge Matzkin, en Interior- para escracharlos e insultarlos.
Por tercer jornada consecutiva el dólar pasó la barrera de los 3 pesos, poniendo en alerta rojo a todo el elenco gubernamental ya que el flamante titular de Hacienda, Roberto Lavagna, se puso como meta impedir que la divisa se escapara de las manos.
Al cierre de las operaciones cambistas, el verde se negoció -en su media- a 3,10, para la compra y 3,20 en su tipo vendedor. Respecto al movimiento bursátil, en el recinto de Sarmiento y 25 de Mayo la tónica fue indefinida. No obstante que el saldo arrojó 45 alzas, 17 bajas y 6 papeles sin cambio, y los 37,9 millones de pesos negociados, el MerVal cedió 0,79%, alcanzando los 405,84 puntos. El índice de la Bolsa terminó acumulando un 3,3% de variación negativa.
De los papeles que conforman el MerVal Transportadora Gas del Sur y Telecom alzaron sus cotizaciones con idéntico porcentaje: 4,76. En tanto, el grupo alimenticio Molinos y la siderúrgica Acindar expresaron la dupla derrotada, alcanzando 7,14% y 5,13%, respectivamente.
Con relación a las empresas hispanas que se transan en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, el tanteador se saldó con signo vencedor por 2 a 1. La petrolera Repsol, cerró con una ganancia de 2,5% y el grupo Telefónica trepó 2,41%, quedando el BBVA, al perder 2,19%, en el segmento derrotado.
En tanto, desde la Casa de Gobierno el Jefe de Estado los presiona a los legisladores de su partido para que, en la venidera semana, se aboquen al tratamiento de la ley de subversión económica y de la de quiebras. La primera deberá ser derogada y la segunda norma legal tendrá que ser reformada, para cumplir de esa manera con las exigencias del FMI.
Si el Ejecutivo les tuerce el brazo a los congresistas, una nueva misión del organismo multilateral viajaría -en este mes- a la Argentina para negociar otra carta de intención que podría desbloquear el desembolso, trabado desde diciembre pasado, de los 9 mil millones de dólares pendientes del famoso «blindaje»suscripto por el ex Presidente radical Fernando de la Rúa. Acuerdo que suena a quimera luego de que a finales de 2001, Adolfo Rodríguez Saa, ex Presidente por una semana, declara la cesación de pagos de la deuda externa argentina.
Los próximos días serán definitorios para la suerte de la gestión del doctor Duhalde. Con un índice inflacionario -para abril- que se conocerá el próximo lunes y que rondaría el 11%; un paro para el 14 de este mes, decretado ayer por la CGT «disidente» liderada por el peronista Hugo Moyano y con conflictos sociales en alza, la administración federal transita por un delgado camino resbaladizo.
Alberto Bastia
LOS MERCADOS ATORMENTAN AL EJECUTIVO
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