Esta situaci´`on no es novedosa en Venezuela y se viene repitiendo cada año en la última década, aun cuando esta vez parece tener más ingredientes políticos que gremiales.La ministra de Salud, María Urbaneja, desacreditó los motivos de la huelga en cadena de radio y televisión en la noche del domingo. «Las negociaciones están abiertas» y «nunca nos hemos negado a negociar», aseguró.
Pero los médicos «hemos asistido como a 80 reuniones sin lograr resultados satisfactorios» y «nuestra huelga ha cumplido con todos los pasos legales», aseguró León Natera.
Entre otras demandas, los médicos que trabajan para organismos del Estado venezolano exigen un aumento salarial de 40 por ciento para este año, pero las autoridades afirmaron que sólo podrán conceder hasta ocho por ciento.
De acuerdo con la FMV, los actuales salarios en dependencias públicas, de entre 500 y 800 dólares mensuales, son «extremadamente bajos para compensar a un profesional en un
momento en que se prevé, además, un repunte inflacionario».
La ministra Urbaneja atribuyó la huelga médica a una «campaña desestabilizadora» de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), la mayor central sindical del país, que, dijo, elaboró una «agenda de paros» con tal fin.
La CTV anunció que prepara una huelga nacional contra el gobierno de Hugo Chávez –en prinicipio programnada poara el 18 de marzo y luego pospuesta ante la falta de “quórum”- y en los primeros meses de este año participó en una serie de manifestaciones callejeras opositoras, con la finalidad de lograr la salida del mandatario, sostuvo el presidente de la central sindical, Carlos Ortega, quien no dejójamás en claro si era por la vía institucional o de las armas.
La paralización de la salud pública se registra en medio de una agudización de la conflictividad política y laboral, incluso con una amenaza de huelga en la principal empresa del país, la estatal Petróleos de Venezuela, y también cuando se agrava una epidemia de dengue. Pero la huelga de la petrolera quedó limitada a los cuadros superiores y gerenciales de la estatal, ya que los trabajadores dieron un pñaso al costado en un conflicto que calificaron de político.
El Ministerio de Salud indicó que 12.647 personas contrajeron el dengue entre el 1 de enero y el 2 de marzo, el triple que en el mismo periodo del año pasado. También se detectó un repunte de la malaria, con 6.025 casos en los dos primeros meses de este año, el doble que en el mismo periodo de 2001. Las autoridades sanitarias han declarado la epidemia por esta enfermedad en varios estados, especialmente del oriente y suroriente.
Si bien este año no se registraron muertes por dengue, el Ministerio de Salud indicó los servicios sanitarios están saturados a causa de la enfermedad, que produce pérdidas de
plaquetas en la sangre.
El dengue –enfermedad endémica en gran parte de América Latina- es transmitido por el mosquito Aedes aegypti, que también propaga la fiebre amarilla. Los primeros síntomas de la enfermedad son semejantes a un estado gripal, con fiebres y dolores de cabeza y en las articulaciones. El mosquito es originario de Africa oriental.
Las autoridades sanitarias han concentrado su combate contra la enfermedad en evitar la reproducción del mosquito. La epidemia de dengue se ha propagado en Brasil, Cuba y en
países de América Central.
La huelga médica afecta a 60 hospitales, unos 4.000 centros asistenciales de menor tamaño y consultorios rurales de todo el país. La FMV acusó a las autoridades sanitarias de estar «jugando con la salud de los pacientes ya que el desabastecimiento de medicinas y equipamiento es de 90 por ciento».
La ministra Urbaneja reiteró que la salud es una de las prioridades del gobierno de Chávez, quien desde su llegada al poder en febrero de 1999 impulsa su «revolución social
bolivariana. «El reto es construir un sistema público de salud capaz de dar respuestas oportunas, equitativas, integrales y de calidad a toda la población, a fin de garantizar la salud como un derecho de los venezolanos», reiteró Urbaneja.
Aram