Para ello, representantes de los tres organismos firmarán un acuerdo de asociación, en el marco de la Cumbre Mundial de Desarrollo Sostenible que se viene realizando, desde el 26 de agosto, en Johannesburg, Sudáfrica.
El objetivo es ayudar a los países de la CAN a acceder a los mercados internacionales con productos y servicios derivados de la biodiversidad y a facilitar su acceso a crédito y capital de riesgo.
En este sentido, se fortalecerán los programas nacionales de biocomercio de los países andinos, para convertirlos en instrumentos de crecimiento y desarrollo sustentable y se promoverá la cooperación regional en el desarrollo de los bionegocios.
Asimismo, se desarrollarán actividades destinadas a promover productos sustentables de biocomercio que sean de interés común y posean un potencial en el mercado internacional. Se prevé también creación de un Sistema Andino de Información sobre Biocomercio.
En general, se «estimularán las actividades de biocomercio, introduciendo la noción de sustentabilidad en los negocios y familiarizando a los productores locales y las comunidades con prácticas empresariales amigables con la naturaleza y fomentando el trabajo conjunto entre el sector privado, los conservacionistas, el gobierno y las comunidades locales e indígenas».
El Programa Andino de Biocomercio se enmarca en la Estrategia Regional de Biodiversidad de la Comunidad Andina aprobada en julio último, que contempla el diseño y la gestión de un conjunto de proyectos y de medidas legislativas, administrativas y de política que le den soporte.
Los países beneficiarios del programa serán Bolivia, Colombia, Ecuador, Perú y Venezuela, que juntos constituyen una de las zonas de mayor riqueza natural en el planeta y concentran alrededor del 25 por ciento de la diversidad biológica mundial.
Las posibilidades de los países en desarrollo y en particular de los andinos, para los bionegocios son, por lo tanto, inmensas. Según datos de la UNCTAD, «el mercado mundial para plantas medicinales alcanzó en 1997 los US$ 16.7 mil millones y se estima que para el 2011 este mercado será más del doble, alcanzando los US$ 40 mil millones anuales».
